Posiblemente todos los tomelloseros de menos de 30 años no hayan oído hablar de Serafín Herizo. Los que ya tenemos una edad le recordamos muy bien; tuvo una tienda de discos en el principio de la calle Independencia. Serafín Herizo, una persona con una sensibilidad especial. Siempre que iba a su tienda pasábamos horas charlando, sobre todo de música y de pintura. Era un enamorado del flamenco, y gracias a él conocí la obra de Félix Grande, pero lo más importante para mí fue conocer a Don Antonio López Torres gracias a él. Para un adolescente de Tomelloso en los años 70, cuya mayor pasión era la pintura, conocer a López Torres era lo máximo.
Serafín jamás tomó lecciones de dibujo o de pintura, aprendió por su cuenta y acompañando a Don Antonio López Torres al campo, observándolo sin molestarle. Dibujaba y pintaba por el placer de hacerlo, pero su modestia le castigaba con cierto pudor para mostrar su obra, aunque recuerdo ver algunos de sus cuadros de temática taurina en la tienda en sus últimos años al frente de la misma.
La exposición que hoy se ha inaugurado en el Museo López Torres se titula “A título póstumo”, y es una especie de retrospectiva de toda su obra, no sólo la de temática taurina, que era la más conocida suya. Se nota su trazo grueso y colorista, al mismo tiempo que su humildad a la hora de afrontar cada obra. Sorprenden sobre todo sus bodegones en formato vertical y con el punto de vista muy elevado, lo que le da una perspectiva diferente. También sorprende el tratamiento de las telas y tapetes, y la armónica combinación de los colores entre las telas y los elementos de los bodegones muy en sintonía entre sí. Además de los bodegones podemos contemplar una serie de paisajes semi-impresionistas, y su serie más conocida sobre la tauromaquia, un tema que le apasionaba.
En la inauguración, la hermana de Serafín ha comentado su satisfacción después de los nervios de la preparación de la exposición, y ha agradecido la ayuda que ha recibido. También ha comentado que Serafín nunca quiso exponer en Tomelloso por cierto pudor, pero cree que ahora era el momento de hacerlo. Por su parte, la concejala de cultura, Nazaret Rodrigo, ha incidido en el carácter reservado de Serafín, y ha manifestado su satisfacción por haber podido sacar a la luz una obra tan intensa y especial, en la que se nota el talento que Serafín atesoraba, en sus trazos libres y coloristas.
La exposición se podrá visitar en el Museo “López Torres” hasta el 23 de Mayo.
Conocí a Serafín Erizo cuando hicimos la mili juntos en la Escuela de Aplicación y Tiro de Artillería en Fuencarral (Madrid). Estuvimos 20 meses y siempre juntos con, además, otro chico de Madrid. Serafín nos decía que era «escultor del hierro». Tenía un carácter socarrón. Descanse en paz.
Julio, ¿recuerdas un andaluz de Écija, llamado Paco Rodríguez Gonzalez? Fui voluntario en la.misma Escuela. Estuve en la oficina se dirección, con el teniente Belisario. Recuerdo aquellos 20 meses, con Serafín, Cardiel y contigo. Fuimos grandes amigos y compañeros. ¿Podríamos contactar tfn…)