Atender a las personas que se hubieran podido haber quedado atrapadas en las carreteras a causa del temporal ‘Filomena’ y garantizar tanto el servicio sanitario para los vehículos que llevaban a pacientes a urgencias o a diálisis, como a los que suministraban la vacuna contra el COVID-19 han sido las prioridades que el Ejecutivo de Castilla-La Mancha se marcó a la hora de abordar la intensa nevada que ha colapsado buena parte del país.
«Ayer se pudieron poner 4.467 dosis de vacunas contra el COVID. En total, llevamos 22.497 dosis, lo que supone un 54 por ciento del total de las vacunas entregadas», ha indicado en rueda de prensa el consejero de Fomento, Nacho Hernando que ha querido hacer un reconocimiento público de los muchos trabajadores que han hecho funcionar el engranaje de la Junta, desde el punto organizativo, sin que «surgieran fricciones».
«Quiero reconocer a tantos trabajadores que pese al diferente color del uniforme que llevarán han sabido trabajar. El elemento común ha sido el escudo de la Junta que tenía que ser sinónimo de solución y de respuesta ante un reto histórico», ha defendido Hernando, en el balance de actuación que ha ofrecido este martes.
«La maquinaria de la Junta ha funcionado desde el punto de vista organizativo, sin ningún tipo de fricción. Todo lo contrario, tanto las brigadas como el Infocam han trabajado como hermanos y no nos hemos peleado como hermanos», ha destacado el consejero.
Así las cosas, ha asegurado que el Ejecutivo regional, en el abordaje de los efectos del temporal, ha repartido tareas con el resto de administraciones. «Es importante que los ayuntamientos se encarguen de las calles, que son suyas; las diputaciones de las carreteras de carácter provincial y la coordinación con el Estado para las autovías y las nacionales».
«Esto no ha dejado de ser una borrasca con datos que superan el registro histórico en más de cien años y la situación, después de las intensas nevadas que se iniciaron el 7 de enero, deja ahora una segunda fase de heladas brutales», ha precisado el consejero, que ha afirmado que el Gobierno regional ha movilizado todos los recursos propios y además ha tirado de los externos, como los ofrecidos por el sector empresarial, al que le ha reconocido el gesto.
«El dispositivo ha funcionado de forma permanente desde el pasado 4 de enero. Quizá ahí se ganó parte importante de la primea batalla y con esfuerzos renovados se puso a trabajar a pleno pulmón desde el jueves y hasta ahora. Será necesario seguir movilizando en los próximos días recursos al máximo nivel para seguir haciendo frente al hielo que queda», ha avisado.
Tras incidir en que de momento no se han registrado «grandes incidencias o disgustos», ha señalado que la prioridad del Ejecutivo sigue siendo ayudar a aquellas personas que peor lo están pasando.
Dicho esto, ha asegurado que algunos municipios han tenido un planteamiento ejemplar que servirá para aprender de cara a futuro, como el de Cuenca «cuyo dispositivo de prevención estaba en condiciones óptimas». «Eso no quita que en zonas muy afectadas, como Toledo y su periferia haya máquinas desplazándose para ayudar».
MEDIOS
Según el responsable castellanomanchego de Fomento, este martes hay afectados 5.648 kilómetros de la Red Regional de Carreteras, la provincia más afectada ha sido ha sido Cuenca con 1.566 kilómetros de la Red afectados, seguido de Toledo con 1.442, Guadalajara con 1.434, Albacete 1.087 y Ciudad Real 119.
Asimismo, a lo largo de la mañana han estado actuando en la Red regional de Carreteras 45 quitanieves apoyadas por seis camiones dotados de esparcidores de sal y 135 máquinas complementarias, 236 operarios de conservación y se han utilizado 248 toneladas de sal.
«En los días más crudos del temporal, en Castilla-La Mancha hemos llegado a tener más de un 70 por ciento de los kilómetros de la Red afectados y nuestras máquinas y nuestros operarios de las Brigadas de Conservación de Carreteras han llegado a estar presentes en más de 200 vías de la región», ha dicho.
Asimismo, ha destacado que se han batido todas las cifras de utilización de recursos tanto materiales como humanos de tal manera que se han llegado a utilizar casi 4.000 toneladas de sal. «Hemos tenido en las carreteras 66 quitanieves trabajando, ocho camiones esparcidores de sal, 159 máquinas auxiliares y casi 300 trabajadores», ha terminado recalcando.
