Francisco Martínez Arroyo, Consejero de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural de Castilla-La Mancha, presentó este jueves, 18 de noviembre, ante bodegueros y representantes de la DO La Mancha la nueva marca de calidad regional, Campo y Alma, creada para sumar valor a los alimentos con Denominación de Origen o Indicación Geográfica Protegida de Castilla-La Mancha.
Previamente, el Consejero de Agricultura inauguró el edificio “Vinos del Quijote”, un espacio adquirido y rehabilitado por el Consejo Regulador La Mancha con fondos propios sobre una estructura de una antigua nave industrial del Polígono Alces de Alcázar de San Juan. Como indicó el Presidente actual del Consejo Regulador, Carlos David Bonilla, “se trata de un proyecto que enorgullece a la Denominación de Origen ya que supera las expectativas y funciones con las que fue proyectado: de ser un almacén logístico de vinos a tener ahora un sala de catas homologada y otras estancias de moderno diseño”
Se trata de un edificio moderno, funcional, sostenible y polivalente en la distribución de sus espacios, que permitirá aumentar la capacidad de respuesta logística del Consejo Regulador. En palabras Martínez Arroyo, “un edificio que resume la esencia de una de las Denominaciones de Origen más grandes del territorio nacional.” Cuenta, por ello, con un banco/almacén de vinos de las bodegas acogidas a la Denominación de Origen La Mancha.
Su espacio diáfano, además, está preparado para albergar catas con mayor aforo, respondiendo así a la mayor demanda promocional de los vinos DO La Mancha.
Dos de sus estancias rinden homenaje los expresidentes del Consejo Regulador La Mancha que también fueron nombrados en su momento presidentes de honor y cuya actuación ha sido fundamental para el desarrollo de esta institución en las últimas décadas. Se trata del tomellosero, ya fallecido, Nicolás López Treviño (1992-2001), y el actual Presidente de Honor, Gregorio Martín-Zarco (2003-2018). Este último dará nombre a la sala profesional de cata, diseñada para el protocolo establecido en el panel laboratorio de cata del Consejo Regulador, en la actualidad, el primero y único acreditado por ENAC en Castilla-La Mancha. Por su parte, López Treviño será el nombre que lleve la sala de reuniones ubicada en la planta superior.
Precisamente, el citado Presidente de Honor, el solanero, Martín-Zarco quiso agradecer el gesto, reconociendo el esfuerzo y la apuesta con este edificio que le ha sorprendido en su diseño y funcionalidad, que perfectamente “refleja el trabajo de viticultores y bodegas de La Mancha”.
‘Vinos del Quijote’, un edificio con mucho arte
La decoración es otro de los alicientes que sorprende al visitante. De hecho, el arte tiene un papel relevante en la decoración, con la creación de un vinilo en blanco y negro (8×3 metros), que recrea al estilo picassiano, pretendiendo también ser un homenaje al genial pintor malagueño, un cuadro que incluye metáforas alusivas al vino, la vid y el Quijote.
No es el único despliegue artístico que atesora el edificio ‘Vinos del Quijote’. El joven muralista alcazareño,Javier López, más conocido en el gremio como Jobs, por sus diseños de gran plasticidad, ha puesto su arte al servicio de los vinos de La Mancha con la decoración de una de las paredes exteriores del centro (200 m2) con una gran belleza visual.