Ante la incertidumbre y el pesar de los días, no podemos dejar de pensar en la situación que nos rodea; son días muy duros en los que parece que todo va a terminar cuando te despiertes y descubras que ha sido una pesadilla… Ojalá fuera así.
Descubro en los medios de comunicación nacionales que Tomelloso es la Wuhan de La Mancha (cuando en Wuhan supuestamente se inició la pandemia, y en Tomelloso lo que existe es que hay muchos casos), esa comparativa es muy dolorosa (al igual que toda la gente que está padeciendo esta afectación), y expone una mala imagen de lo que es mi pueblo.
Es cierto que hay muchos casos, y que, por desgracia, hay mucha gente que ha fallecido… Pero lo que no menciona ningún medio de comunicación es que hay un pueblo entero luchando contra esta pandemia: empresas que han donado material sanitario y/o de limpieza; voluntari@s que han confeccionado mascarillas y/o productos de protección; agricultores que han desinfectado calles; jóvenes que de forma altruista se han ofrecido para realizar tareas y compras a gente mayor o que vive sola; particulares y empresas que consiguen dotar al hospital de 40 camas y colchones en cuestión de horas. Colectivos que consiguen material sanitario (purificadores de ozono, ropa de cama, termómetros, pulsioxímetros, etc.). También empresas de comunicación e informática (y personal voluntario del hospital) que facilitan la comunicación de pacientes con sus familiares mediante telefonía y nuevas tecnologías (para tranquilizar a ambas partes y evitar la incertidumbre); una plataforma donde te ofrecen asesoramiento sobre los comercios que están abiertos y/o gente que te puede ayudar; profesionales que ofrecen sus conocimientos de forma gratuita (maestros, profesores, instructores, monitores, etc); destilerías y bodegas que están elaborando alcohol para colaborar con los centros sanitarios; empresas que, por medio de la tecnología de las impresoras 3D están haciendo pantallas de protección y adaptadores para respiradores; vecin@s que intentan amenizar con música o actividades lúdicas el día a día del confinamiento de l@s que les rodean …Y un grupo de superheroinas, que son nuestros sanitari@s, que en etapas pasadas han sido cuestionados, y que ahora están haciendo de un hospital pequeño, como es el de Tomelloso, el trabajo de un hospital grande, cubriendo una demanda de pacientes muy por encima de su capacidad, luchando por cada uno de los pacientes que allí ingresan (todos los aplausos que se están dando son pocos para los que merecen). Tampoco se menciona a los cuerpos de seguridad del Estado, o los de transporte sanitario, o la gente que trabaja en comercios con el fin de abastecer de a la población (y que intentan sacar su mejor sonrisa, aunque tengan la misma tensión que el resto), servicios de limpieza, transportistas, agricultores y así un largo etcétera.
En definitiva, un pueblo completamente entregado a la lucha contra una pandemia que, por desgracia, se ha cebado con sus habitantes, pero que en ningún momento ni ha bajado los brazos y está demostrando, otra vez, que sabe trabajar de forma colectiva, y solidaria por sacar esta situación adelante.
Durante muchos años nuestros ancestros han hecho que hoy por hoy nuestra ciudad sea un referente a nivel nacional y digna de elogios tanto por su gente, como por su industria, su cultura y sus tradiciones. Siempre he presumido de Tomelloso, de ser tomellosero, de todo el esfuerzo que han puesto nuestros antepasados y por el afán emprendedor que existe en la actualidad.
Hay mucha gente que trabaja desde la sombra y se inquietan por buscar mejorar el día a día de l@s demás; prueba de ello son la cantidad de asociaciones y grupos que existen en nuestra localidad que trabajan por el bienestar del resto, y lo están demostrando en otra ocasión.
Por favor, no solamente hablen de lo malo que está pasando en mi pueblo, sino también la lucha que estamos teniendo por combatir esta pandemia, y como cada persona está sacando su lado más solidario por revertir y recuperar el día a día que antes teníamos.
José María Belló Picazo
