En la lengua castellana tenemos un prolijo refranero que nos ofrece en pocas palabras claves esenciales. Uno de los refranes más populares en nuestra tierra, que seguro en algún momento hemos escuchado pronunciar a nuestros padres o abuelos, con la voz de la experiencia, es aquel que dice ‘más vale prevenir que curar’.
Precisamente la prevención para implantar aquellas medidas que se consideran oportunas para reducir los riesgos y posibles daños que se derivan de las situaciones de calamidad pública o catástrofe extraordinaria es una de las principales funciones de la Protección Civil, cuyo Día Internacional se conmemora hoy.
Prevención que, con carácter previo a esa posible situación de catástrofe, debe ir acompañada de previsión, para analizar los supuestos de riesgos y sus causas y efectos; y de planificación, a fin de establecer las líneas de actuación a llevar cabo para hacer frente a los daños que pudieran producirse.
Unas labores que se complementan con la intervención para proteger la vida de las personas y la integridad de los bienes y del medio natural cuando se producen estas situaciones catastróficas e, inmediatamente, de la rehabilitación para recuperar la normalidad.
En definitiva, un conjunto de actuaciones, en gran parte preventivas, que constituyen un servicio público, en el que es fundamental la colaboración y coordinación de todas las administraciones públicas.
Desde el Gobierno regional estamos plenamente comprometidos con ese trabajo previo, que hay que llevar a cabo día a día, sin titulares de prensa y que es el único que puede garantizar la minoración de los riesgos cuando sobrevienen situaciones en las que se puede poner en peligro la vida de las personas.
Por ello, trabajamos en el establecimiento de protocolos operativos con otras entidades y administraciones públicas y, en el caso de los ayuntamientos, contribuimos a su labor en la materia a través de las subvenciones que, con carácter anual, convocamos para que estos puedan elaborar sus respectivos planes de protección civil de ámbito municipal.
También en coordinación con ellos y con todos los grupos de intervención en situaciones de emergencia organizamos de forma periódica diferentes simulacros, que nos sirven para analizar nuestra capacidad de respuesta y corregir cualquier posible deficiencia que se pueda detectar en la cadena de actuaciones para ofrecer respuestas rápidas, eficientes y coordinadas a las situaciones de emergencia.
En definitiva, diferentes líneas de trabajo que realizamos con el convencimiento de que llevarlas a cabo de manera preventiva es la mejor garantía para asegurar la protección de la ciudadanía en situaciones de riesgo.
Así se ha demostrado con las diferentes emergencias que se han producido en los últimos años en la región, en las que se ha puesto en práctica toda esa labor previa, que ha permitido ejecutar un trabajo coordinado entre las diferentes administraciones públicas implicadas y los múltiples grupos de intervención y cuyo resultado ha sido una minoración de los efectos negativos de esas situaciones catastróficas.
Desde el Gobierno regional nos sentimos sumamente orgullosos del trabajo realizado por todos los profesionales implicados en el ámbito de la Protección Civil, por lo que hoy, en el Día Internacional de su campo de trabajo, queremos enviarles nuestra más sincera felicitación por su esfuerzo; además de trasladar a la ciudadanía un mensaje de tranquilidad porque siempre que se les necesite ellos estarán preparados para intervenir.
Juan Alfonso Ruiz Molina
Consejero de Hacienda y Administraciones Públicas