Comienza la primera fase de la construcción de la Estación de Filtrado en Tomelloso, una obra que tiene como objetivo mejorar la calidad del agua en la localidad. Por una inversión de 1.400.000€, se trata de «la mayor actuación en materia de agua» que se haya hecho en el municipio en los últimos años.
Así lo ha explicado el concejal de Promoción Económica, Iván Jesús Rodrigo, quien ha afirmado que la cuantía supera incluso los presupuestos de las obras de la Plaza de España, el Mercado de Abastos o el Colector de la Avenida Juan Carlos I, sobre todo teniendo en cuenta que la obra se hará con fondos propios del Ayuntamiento.
De momento, se calcula que las obras tendrán una duración de 7 meses, con un periodo de prueba inicial de 3 meses. Teniendo en cuenta que los movimientos de tierra comenzaban el pasado mes de noviembre, se espera terminar las obras a finales de verano, tras lo que empezaría el periodo de prueba, por lo que las primeras ventajas de la planta de filtrado llegarían en noviembre-diciembre.
¿QUÉ CAMBIARÁ ESTE NUEVO FILTRO?
Cabe recordar que el agua que llega hasta Tomelloso proviene del Embalse de Peñarroya, y esta baja por gravedad hasta los Depósitos de Santa María. Una vez allí, se clora, se desinfecta, y baja hasta Tomelloso y Argamasilla de Alba. Sin embago, el nuevo sistema incorporará de manera intermedia una Estación de Filtrado que eliminará los residuos secos (tierra, arena) y las partículas en suspensión que venían desde Peñarroya.
Según ha expuesto el concejal de Urbanismo, José Ángel López Navarro, hasta ahora ya se han instalado las tuberías que permitirán vaipasear el agua desde la tubería del embalse a los depósitos y traerlo filtrado. «Hablamos de 8 depósitos que harán de filtro con tamaños de 6 metros de largo y 2,5 de alto».
Ahora, comienzan las obras de la solera, donde se intalará una nave con 3 espacios: en primer lugar, el grupo de electrógenos para funcionar en caso de emergencia o nubosidad; en segundo lugar, el depósito de hipocloritos y almacenes de productos químicos; y en tercer lugar, las baterías de la planta fotovoltaica. Teniendo en cuenta que la idea es que la planta se alimente de energía renovable, se seguirá el siguiente proceso: si la planta deja de producir por nubosidad, empezará a tirar de electricidad en las baterías, y si este recurso se agota, le tocaría el turno al grupo de electrógenos de apoyo en caso de emergencia.
¿QUÉ BENEFICIOS NOTAREMOS DESDE CASA?
Este sistema de filtración supone un cambio en el uso del cloro, por lo que el agua bajará hasta Tomelloso perfectamente filtrada y desinfectada, pero con menos olor a cloro. Además, aquellas personas que cuenten con un filtro de agua en su casa, notarán cómo se reduce la cantidad de partículas. Por otro lado, también podrá apreciarse una relativa mejora en la presión del agua, ya que la eliminación de partículas conlleva que el agua salga con más fluidez.
«El agua de Tomelloso será un agua que se pueda consumir sin riesgo, los vecinos tendrán esa tranquilidad», ha asegurado López, quien recuerda que Sanidad ya advertía desde hace años de la necesidad de filtrar el agua para garantizar su calidad.
Los vecinos que más notarán estos cambios son lo que residan en zonas de finales de red o las zonas más bajas topográficamente, que son quienes históricamente han tenido más problemas en relación al abastecimiento de agua en el municipio.
