El ministro de Sanidad, Salvador Illa, se ha mostrado este martes abierto a estudiar la posibilidad de decretar un toque de queda como medida para luchar contra el coronavirus, aunque ha avisado de que requeriría de la aprobación del estado de alarma y ha instado al PP a aclarar si contaría con su apoyo en las Cortes Generales.
En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, Illa ha aceptado que el toque de queda, planteado por la Comunidad de Madrid, es una de las posibilidades que puede aprobarse para evitar la propagación del coronavirus y así lo estudiará el Gobierno con todas las comunidades autónomas.
Sin embargo, ha explicado que los servicios jurídicos del Gobierno apuntan que solo sería posible mediante la aprobación del estado de alarma, y por ello necesita saber los apoyos con los que contaría en caso de que requiriese ser prorrogado por el Congreso más allá de los 15 días iniciales.
«Si decidiéramos ir por ese camino sería muy importante saber qué grupos, y especialmente el PP, estarían dispuestos a dar su apoyo en el Congreso», ha apremiado el ministro, que sin embargo ha reconocido que no ha tenido ningún contacto al respecto con los ‘populares’ y su interlocución se limita a los consejeros de Sanidad de las comunidades autónomas.
Illa ha insistido en que el toque de queda es solo una opción de las muchas que podrían ponerse en marcha para evitar la propagación de la pandemia y ha dejado abierto tanto el marco territorial en el que se aplicaría como sus concreciones respecto a los horarios u otros aspectos.
DESCARTA EL MANDO ÚNICO
El ministro ha avisado de que las próximas semanas serán «muy duras» y ha destacado las medidas que están adoptando las comunidades autónomas, algunas de ellas «muy importantes y contundentes». Así, ha explicado que el Gobierno no quiere «sustituir» a ninguna administración, sino ejercer un papel de coordinación.
«No es cuestión de una comunidad autónoma, tenemos que actuar todas en coordinación», ha insistido antes de la reunión del Consejo Interterritorial de Salud que se celebrará el próximo jueves. Además, ha rechazado la posibilidad de volver al mando único por parte del Ejecutivo porque su objetivo no es «invadir» las competencias de ninguna otra administración, sino «coordinarlas».
NUEVAS MEDIDAS ACORDADAS CON AYUSO
En el caso concreto de la Comunidad de Madrid, ha confirmado que el Gobierno no prorrogará el estado de alarma y estudiará con el Ejecutivo de Isabel Díaz Ayuso las medidas adoptar una vez decaiga el próximo sábado. Según ha reconocido, los casos en la región han bajado tras 21 días de medidas «muy estrictas», pero ha avisado de que los datos siguen siendo «preocupantes» y es necesario estudiar alternativas.
En este sentido, ha evitado ahondar en la confrontación con el Gobierno de Ayuso y ha asegurado que su objetivo es únicamente «acertar» al tomar las medidas y bajar la incidencia de la pandemia en España. «Las comunidades autónomas están tomando medidas, me importa poco si mejora o empeoran su respuesta, me importan las medidas», ha garantizado.