La ministra de Igualdad, Irene Montero, ha remitido una carta a las Comunidades Autónomas pidiendo el cierre de los prostíbulos y lugares de alternes con motivo del coronavirus, en línea con las restricciones establecidas a bares, discotecas y locales de ocio.
«Que no demos tregua a la explotación sexual, que no demos tregua a esa industria proxeneta que siempre permanece en la impunidad y en la absoluta opacidad. Se habla mucho de los derechos de las mujeres en contexto de prostitución pero no de las cifras de negocio», recuerda.
Ahora, ha añadido que la experiencia acumulada debe servir para garantizar ahora los derechos de las mujeres que ya, de partida están en una situación de vulnerabilidad. A ello se suma la posibilidad de que si se producen rebrotes o contagios es «más difícil el rastreo».
En ese sentido, ha agregado que otra de las cuestiones que deben caracterizar a un Gobierno es su capacidad, con el conjunto de las administraciones para garantizar de forma integral los derechos de las mujeres que están en condiciones de prostitución y son víctimas de explotación sexual y para cerrar esos prostíbulos y locales del alterne.
Por último, ha asegurado que su Ministerio está también trabajando de forma «decidida» contra la explotación sexual y para garantizar una reforma integral de los derechos de las mujeres que están en esa situación.
LA CARTA: «HONDA PREOCUPACIÓN» POR LOS REBROTES
En la misiva, a la que ha tenido acceso Europa Press, la ministra Montero se dirige al consejero del ramo para mostrarles su «honda preocupación por los brotes conocidos en prostíbulos y locales de alterne» en España.
«La pandemia sigue siendo una realidad en nuestro país y, dentro de las medidas acordadas con Sanidad que limitan la apertura de bares, restaurantes, discotecas y otros locales de ocio nocturno y sin perjuicio de nuestra constante lucha contra la explotación sexual, considero importante que se actúe específicamente sobre aquellos lugares donde se ejerce la prostitución», continúa el texto remitido por la responsable de Igualdad.
Del mismo modo, señala que «la salud y los derechos de las mujeres son fundamentales» y que «la situación sanitaria hace que los contagios que puedan producirse en esos locales lleven a un aumento exponencial de positivos de difícil rastreo». Por ello llama a «la experiencia de coordinación» que, a su juicio, se vivió «durante el estado de alarma» y que «permitió habilitar recursos habitacionales y de atención sociosanitaria».
«Sería un elemento fundamental para ofrecer a estas mujeres, tras los cierres de los locales, alternativas dignas que se hagan cargo de su situación», expone la dirigente de Podemos.
«Agradeciéndote el interés en este asunto particularmente grave, pues estoy segura de que para ti también será un motivo de preocupación, te reitero la plena disponibilidad del Ministerio de Igualdad para que avancemos en cooperación en esta y en todas las materias que nos ocupan», concluye Montero.