La Diputación de Ciudad Real ha hecho pública la tercera convocatoria del Plan de Emergencia Social para hacer frente a las necesidades que se han generado en el seno de los núcleos familiares más vulnerables de la provincia a raíz de la crisis sanitaria, económica y social que ha provocado la incidencia del coronavirus en nuestro territorio.
Se cumple así el compromiso anunciado por el presidente de la institución provincial, José Manuel Caballero, durante el confinamiento, cuando declaró que la dotación económica del Plan de Emergencia Social se aumentaría las veces que fuera necesario para que nadie se quedara atrás en la provincia. Se trata de una acción que se enmarca, a su vez, en el Plan Ciudad Real Activa, ideado y puesto en marcha para contribuir a la recuperación socioeconómica.
A través del Área de Atención a las Personas, se han consignado otros 250.000 euros, por los que son ya 1’7 millones de euros los que ha destinado la Diputación de Ciudad Real este año para ayudar a las familias que tienen problemas para cubrir sus necesidades básicas. Con esta iniciativa se pretende paliar situaciones excepcionales y urgentes que pueden provocar o agudizar el desarraigo o la marginación social.
En este sentido, se subvencionan gastos de alimentación básica e higiene así como artículos de limpieza y aseo personal. También se podrán atender gastos excepcionales de diversa índole que tienen que ver con extrema necesidad de vestido y calzado, gastos farmacéuticos, suministros básicos de la vivienda o alojamiento temporal y gastos de desplazamiento.
Pero no será subvencionable el abono de hipotecas, de gastos corrientes corrientes de alquiler, vacunas, material escolar, inversiones en obras y reparaciones de inmuebles ni equipamientos del hogar, entre otros con los que no se consigue proporcionar una solución estable en el tiempo a la problemática social detectada.
Con motivo de la declaración del estado de alarma generado por la crisis sanitaria ocasionada por el COVID-19 el pasado 14 de marzo, la Diputación de Ciudad Real quiso anticiparse a la graves consecuencias socio-económicas que podría suponer para algunas familias de la provincia. Ante esta situación, se decidió modificar el Plan de Ayudas de Emergencia Social tal y como se había publicado para el año 2020, con una dotación de 1’2 millones de euros, con el objetivo de que se pudiera llegar al mayor número de familias incrementando el importe de la ayuda.
El impacto de la pandemia ha sido tan devastador en cifras, que en las primeras semanas de mayo se constató que el crédito que había previsto para el ejercicio 2020 ha sido consumido durante la crisis.
Así pues, el 22 de mayo de 2020 la institución publicó una segunda convocatoria del Plan de Emergencia Social, dotada con 250.000 euros y con una vigencia que abarcaba desde el 12 de mayo hasta el 15 de agosto. Como se ha constatado que siguen siendo muy necesarias las ayudas, la Diputación ha decidido poner en marcha una tercera convocatoria del Plan de Emergencia Social que permanecerá vigente hasta final de año, ya que el plazo de solicitud finalizará el próximo 15 de diciembre.