La Federación Regional de Empresarios de Hostelería de Castilla-La Mancha, al unísono con la Hostelería de España, considera que la flexibilización de los Expedientes Reguladores Temporales de Empleo es una medida positiva pero debe acompañarse de otras medidas fiscales y administrativas que garanticen la subsistencia de los establecimientos hosteleros una vez finalice la crisis.
«Teniendo en cuenta que el Gobierno ha anunciado que en el próximo Consejo de Ministros además de ésta, se aprobarán varias medidas en torno a la adopción de políticas en apoyo de los trabajadores, los autónomos y las empresas y de apoyo a la actividad de las empresas con soportes para su liquidez, desde la organización empresarial que representa a los restaurantes, bares, cafeterías y pubs de Castilla-La Mancha reclamamos al Gobierno que dichas medidas vengan acompañadas de las siguientes medidas concretas, todas ellas absolutamente necesarias para asegurar la viabilidad de los negocios hosteleros de nuestro país», han indicado en nota de prensa.
Dicho esto, han solicitado la suspensión de cualquier obligación de pago de los establecimientos hosteleros a las administraciones, de impuestos y cotizaciones sociales, así como de tasas, entre las que se encuentran las tasas de autónomos, todo ello con la finalidad de minimizar el impacto en los casi 17.000 establecimientos hosteleros que conforman el sector en Castilla-La Mancha.
Por otro lado, han instado al Gobierno a que ordene la paralización de las obligaciones económicas de los establecimientos hosteleros con los arrendadores de sus negocios, de tal manera que no se vean sobrepasados por el pago de estos alquileres mientras sus negocios no estén en su normal funcionamiento.
Así las cosas, han pedido al Ejecutivo suprimir todas las tasas e impuestos en todos los suministros de energía, así como la paralización de las obligaciones de los negocios hosteleros con los bancos de préstamos, de las hipotecas y créditos, entre otros.
«Desde la Federación Regional de Empresarios de Hostelería de Castilla-La Mancha seguimos apelando a la sensibilidad del gobierno español y pedimos que tenga en cuenta la delicada situación a la que se enfrentan los negocios hosteleros españoles», ha concluido la federación, que dice estar en contacto con la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, a través de la Dirección General de Turismo, Comercio y Artesanía, para concretar todas las actuaciones en defensa del sector hostelero de la región.