La portavoz del PP en Castilla-La Mancha, Claudia Alonso, ha explicado a los castellanomanchegos que el Gobierno regional podía haber iniciado los trámites para reclamar el IVA de 2017 en septiembre del año pasado gracias a una moción que presentó el PP en las Cortes –el primer parlamento en España en el que se pidió esta cuestión– y no se hizo «por culpa del PSOE, que votó en contra».
Ha sido en rueda de prensa en las Cortes, donde Alonso ha recordado a los dirigentes del PSOE y del Gobierno castellanomanchego que esta cuestión debería estar solucionada ya hace bastante tiempo si el presidente, Emiliano García-Page, hubiera tenido «valentía».
Fue en septiembre del año pasado –ha rememorado la dirigente del PP–, cuando el Grupo Parlamentario Popular presentó una moción en la que se pedía la convocatoria urgente del Consejo de Política Fiscal y Financiera para tratar la devolución del IVA de 2017 y se instaba a la Junta a realizar la reclamación oportuna.
Sin embargo, ha lamentado Alonso, el PSOE votó en contra de esta iniciativa de los ‘populares’ y de reclamar los 130 millones que le corresponden a Castilla-La Mancha bajo el argumento –ha manifestado– de que no querían judicializar esta cuestión.
A su juicio, el presidente de Castilla-La Mancha en aquel momento –España estaba sumida en elecciones generales– estaba más preocupado de «no molestar» a Pedro Sánchez que de reclamar «lo que era justo y necesario» para la región.
Dicho esto, se ha referido a la reunión del Consejo de Política y Fiscal y Financiera celebrada el viernes y ha cargado contra el consejero de Hacienda y Administraciones Públicas, Juan Alfonso Ruiz Molina, por no reclamar el IVA de 2017 y no votar a favor de la propuesta que hicieron los consejeros de las comunidades autónomas gobernadas por el PP.
«El consejero podía haber alzado la voz para pedir lo nuestro, pero no lo hizo», ha criticado Claudia Alonso, quien se ha mostrado en contra de la propuesta hecha por el Gobierno central, es decir, «no quiere que Castilla-La Mancha se endeude más».
Finalmente, ha pedido al Gobierno de García-Page que no siga manteniendo «ese doble juego» y no tome por tontos a los castellanomanchegos.
