La portavoz del Gobierno de Castilla-La Mancha, Blanca Fernández, ha avanzado que toda vez que pase la pandemia de coronavirus y cuando se pueda retomar la actividad parlamentaria, el Ejecutivo autonómico ve necesario promover «por consenso» una ley de crédito presupuestario para ordenar el gasto de cara a la recuperación económica.
A preguntas de los medios tras una rueda de prensa, Fernández ha señalado que este extremo ya fue trasladado a los representantes de PP y Cs en la videoconferencia del pasado lunes, tras lo que se ha mostrado confiada en «contar con su complicidad» para sacarla adelante en el Parlamento.
En todo caso, sí ha dejado claro que las premisas inamovibles del Gobierno regional pasan por dos pilares como son «blindar los servicios públicos y no volver a la fórmula de los recortes» para salir de la crisis que vendrá.
«Desde el Gobierno de Castilla-La Mancha entendemos que lo primero son los servicios públicos y habrá que trabajar para que nadie quede en el camino. Esas son nuestras premisas básicas, pero estamos abiertos a más medidas y a negociar los presupuestos y todo lo que haga falta», ha aseverado.
Ha sido en este punto donde ha criticado la postura expresada este martes por el Partido Popular, a quien acusa de incurrir en «contradicciones internas», ya que en un primer momento su presidente, Paco Núñez, «dijo que se sumaría al pacto si se sustentaba en presupuesto», mientras que su portavoz parlamentaria, Lola Merino, aseguraba poco después que «no se sumarían en ningún caso».
«En nombre del Gobierno, deseo que el PP tenga una única voz», ha zanjado.
