El comercio minorista en Castilla-La Mancha registró un descenso contenido de sus ventas del 0,7% en junio respecto al mismo mes de 2019, frente a la caída del 3,3% que presenta la media nacional, según ha informado este miércoles el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Por otro lado, el efecto del COVID sobre el empleo en el comercio al por menor de la región se vio diluido por la posibilidad de las empresas de acogerse a un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE). La ocupación bajó un 2,9% en tasa anual en el mes de junio en la región. En términos mensuales, el empleo del sector creció un 1,7%.
DATOS NACIONALES
A nivel nacional comercio minorista registró un descenso de sus ventas del 3,3% en junio respecto al mismo mes de 2019, moderando así la caída, superior al 20%, del mes de mayo. Con este retroceso interanual en junio, la facturación del sector acumula cuatro meses consecutivos de descensos.
No obstante, en términos mensuales, el comercio minorista notó la mayor apertura comercial que propició la desescalada de los distintos territorios y elevó su facturación un 17,8% en junio respecto a mayo si se eliminan los efectos estacionales y de calendario.
Con este avance mensual del 17,8% registrado en junio, el comercio minorista encadena dos meses consecutivos de aumentos en su facturación dentro de la serie corregida, aunque el de junio ha sido algo más moderado que el de mayo (+19,4%).
En todo caso, el incremento de las ventas del comercio minorista en mayo y junio contrasta con los fuertes retrocesos mensuales que se registraron en marzo (-15,1%) y abril (-20,1%) por el Covid-19 y la declaración del estado de alarma.
El comercio en empresas unilocalizadas incrementó sus ventas mensuales un 16,3%, mientras que las pequeñas cadenas las elevaron un 34,7%, mostrando, según el INE, un «gran dinamismo». Pese a ello, las grandes superficies fueron las que lideraron el crecimiento mensual de las ventas, con un avance respecto a mayo del 45,1%. En el caso de las grandes cadenas, la facturación mensual creció bastante menos, un 5,7%.
Las ventas de productos alimenticios disminuyeron un 2,1% respecto al mes de mayo, pero se dispararon un 41,2% las del resto de productos, especialmente en el segmento de equipo personal (+89,6%) y equipo del hogar (+43%). Los otros bienes, por su parte, facturaron un 19,4% más que en mayo.
Las ventas de las estaciones de servicio también registraron un fuerte repunte mensual, del 35%, debido probablemente a que la reanudación de la movilidad y el fin del estado de alarma aceleró las ventas de combustibles para automoción.
SE MODERA LA CAÍDA INTERANUAL
En términos interanuales, el comercio al por menor todavía no alcanza los registros de hace un año, de modo que las ventas retrocedieron un 3,3% respecto a junio de 2019, aunque este descenso fue mucho más moderado que el de mayo.
Las ventas de alimentos bajaron en junio un 1,4% interanual y las del resto de bienes disminuyeron un 1,2% debido exclusivamente a la caída de la facturación en el segmento de equipo personal (-22,2%), ya que el equipo del hogar y los otros bienes elevaron sus ventas un 13,4% y un 1,7%, respectivamente.
La movilidad por todo el territorio nacional no estuvo permitida hasta la cuarta semana de junio, cuando finalizó el estado de alarma. Este hecho, unido al mantenimiento del teletrabajo en las empresas y al descenso del turismo, ocasionó un retroceso interanual de las ventas en estaciones de servicio del 22,9%.
Por su parte, el comercio ‘online’ continuó mostrando un notable dinamismo en el mes de junio, al registrar un avance interanual del 71,2%, pero la vuelta a la normalidad hizo que en términos mensuales descendiera un 2% respecto al mes de mayo.
Por modos de distribución, las ventas bajaron en las pequeñas cadenas y en las empresas unilocalizadas, con retrocesos interanuales del 13,3% y del 4,1%, respectivamente, pero subieron en las grandes cadenas (+4,4%) y en las grandes superficies (+2,7%).
Corrigiendo los efectos estacionales y de calendario, las ventas del comercio minorista registraron en junio una caída interanual del 4,7%, moderando en más de 14 puntos el descenso de mayo (-18,9%).
EL EMPLEO RETROCEDE UN 3,7%
Por otro lado, el efecto del Covid sobre el empleo en el comercio al por menor se vio diluido por la posibilidad de las empresas de acogerse a un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE). En el conjunto de España, la ocupación bajó un 3,7% en tasa anual en el mes de junio, una décima menos que en mayo.
En términos mensuales, el empleo del sector creció un 1,6%, destacando el repunte de las grandes superficies (+4,9%), superior al registrado en las grandes cadenas (+2,1%), las pequeñas cadenas (+1,3%) y las empresas unilocalizadas (+0,7%).
LAS VENTAS SUBEN EN CINCO COMUNIDADES
La facturación del comercio minorista bajó en junio en tasa interanual en doce comunidades autónomas y subió en Asturias (+3,7%), Madrid (+1,6%), Galicia (+1,1%), Aragón (+0,7%) y País Vasco (+0,6%).
En el resto de regiones se registraron descensos interanuales, especialmente en las más vinculadas al turismo. Así, Baleares recortó su facturación un 21%, mientras que Canarias lo hizo en un 11,9% y Cataluña en un 7%. Por su parte, los menores retrocesos se los anotaron La Rioja (-0,1%) y Castilla-La Mancha (-0,7%).
En lo que se refiere al empleo, todas las comunidades registraron tasas anuales negativas. El mayor descenso lo experimentó de nuevo Baleares, con un retroceso de la ocupación del 11,3%, seguida de Canarias (-6%) y Andalucía (-4,7%).