El invierno 2020-2021 será cálido en cuanto a las temperaturas normales de la estación, y más seco en cuanto a las precipitaciones medias en Castilla-La Mancha, donde se espera una Navidad sin nieve pero sí fría y con precipitaciones moderadas.
Es la predicción que ha hecho este jueves en rueda de prensa la delegada de la Agencia Estatal de Meteorología, Paloma Castro, donde ha explicado que estas predicciones siempre son probables y se hacen según cálculos de la Aemet, el modelo Copérnicus y del Centro Europeo, ha especificado.
Castro ha anunciado que tanto esta semana como la siguiente de Navidad serán de anomalías de precipitación ambas, pero sólo de anomalía cálida esta semana mientras que la de la Navidad será fría. El mismo día de Navidad sí se esperan precipitaciones moderadas probables, pero no nieve. «O bien nieblas o bien lluvias», ha señalado la delegada de la Aemet.
Unas lluvias que en Toledo podría ser de más de 20 milímetro por metro cuadrado mientras que en las demás provincias no alcanzaría al 10 milímetros durante la Navidad, sin que afectaran a la zona oeste de la región.
En cuanto al otoño ha sido ligeramente cálido y ligeramente seco, con anomalías de temperatura que han sido muy suaves, la mayor en Ciudad Real con 0,6 º y muy similar en el conjunto de Castilla-La Mancha con 0,5º. La temperatura media ha sido de 14,7º, ha informado la Delegación del Gobierno en un comunicado.
OCTUBRE «MUY FRÍO»
Concretando por meses, septiembre ha sido normal, octubre muy frío «el más frío del siglo XXI en Castilla-La Mancha» y noviembre muy cálido. La temperatura más baja de toda la región se alcanzó el 12 de noviembre en la provincia de Guadalajara con – 7,3º, la más fría de toda España.
También destacan los once días de heladas que tuvo Molina de Aragón. La zona oriental de la región ha sido la más fría y la zona occidental más cálida. Por provincias, la temperatura más cálida ha sido la de Ciudad Real con 16,1º y la más fría en Guadalajara con 12,3º.
En cuanto a las precipitaciones ha habido «un poco de todo», según Castro, que ha señalado que «en conjunto» el otoño ha sido «ligeramente seco, con un 0,5%». En cuanto a los meses del otoño, la precipitación en conjunto ha llegado a unos 123,4 milímetros mientras que en España de media han caído 173 milímetros, con lo que no se han «alcanzado los 200 milímetros en ningún caso que sería lo normal en la serie histórica 81-2010».
«Esto significa que, si vamos mes a mes, las lluvias no han sido muy abundantes, pero en septiembre han sido torrenciales asociadas a tormentas, en octubre han sido asociadas a borrascas, las borrascas Álex y Bárbara que aunque seco ha tenido estos dos momentos fuertes en precipitaciones que son las que han dejado cantidades e intensidades significativas pero no torrenciales como fueron en septiembre mientras que en el mes de noviembre hemos tenido otra serie de danas y borrascas que aunque moderadas, nos han dado cierta humedad, sobre todo en la zona oriental de Castilla-La Mancha», ha manifestado Paloma Castro.
En Noviembre se produjo una efeméride en cuanto a precipitaciones que fue la caída de 8,6 litros por metro cuadrado en 10 minutos y que afectó sobre todo a la provincia de Cuenca. Ciudad Real destaca con los parámetros de más cálido y más seco.
En cuanto al agua embalsada, consecuencia de las precipitaciones, en estos momentos Toledo va «muy bien», con un 44-57% de agua embalsada y Guadalajara «muy mal» con un 29,5% de agua embalsada. La situación del Tajo es «normal» con un 102% a 15 de diciembre y resalta la sequía en el Guadiana al 84%.
Paloma Castro ha hecho referencia, de otro lado, a los premios entregados en Alcolea de Calatrava con motivo de su colaboración con la Aemet «que lo ganaron el 23 de marzo que fue el Día Meteorológico Mundial, pero que no pudo ser entregado a causa de la pandemia».
