La Gerencia de Atención Integrada de Tomelloso integra un laboratorio de Investigación biomédica en su actividad científica lideradas por el equipo de Digestivo, un referente internacional en esofagitis eosonofílica.
El consejero de Sanidad, Jesús Fernández Sanz, ha querido conocer el espacio y el trabajo que se desarrolla en él como los proyectos de investigación y la participación en estudios multicéntricos.
En ese sentido, el gerente del Área Integrada de Tomelloso, Antonio Sanz, ha destacado que el Hospital de Tomelloso “tiene una ventaja competencial, como es tener uno de los mejores investigadores de Castilla-La Mancha, como el doctor Alfredo Lucendo.
Así, el grupo de investigación de Enteropatías eosinofílicas e Inmunología de la mucosa digestiva, que lleva desarrollando su actividad en Tomelloso desde el año 2008, es una referencia tanto a nivel nacional como internacional en la investigación clínica, básica y epidemiológica de la esofagitis eosinofílica (Eeo) y cuenta 150 publicaciones en revistas especializadas.
La inversión total de la reforma es de 15.000 euros que se sufragan de forma conjunta entre la Gerencia de Tomelloso y la Fundación Hospital Nacional de Parapléjicos.
La línea de investigación principal del equipo de Digestivo de Tomelloso es la Esofagitis eosinofílica, una enfermedad crónica del esófago de base inmunológica que afecta cada vez a más personas.
Actualmente, las principales áreas de trabajo se centran en la identificación de marcadores mínimamente invasivos de la esofagitis eosinofílica y la fibrosis, aspectos epidemiológicos de la enfermedad o estudios sobre la expresión de la microbiota en la esofagitis, entre otros.
Los intereses de investigación del grupo incluyen también el mantenimiento de registros y bases de datos que apoyan investigaciones multicéntricas en enfermedad inflamatoria intestinal, colitis microscópica y Helicobacter pylori.
El doctor Alfredo Lucendo ha explicado que “hacemos estudios multicéntricos, estudios internacionales, coordinamos ensayos clínicos nacionales y participamos en los comités de diseño de varios ensayos clínicos internacionales, que se deciden desde aquí, junto a otros investigadores de otros países de cómo se deben hacer esos estudios. Esto demuestra que estar en un hospital pequeño, en el siglo XXI, no supone ninguna limitación para la investigación”.