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miércoles, 18 diciembre
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Una etiqueta que indique que los juguetes no son tóxicos, principal recomendación antes de comprar

El Gobierno regional ha desglosado varios consejos a la hora de comprar juguetes para los niños en estas épocas navideñas

Con la llegada de la Navidad toca pensar en el juguete más adecuado para los niños. Por ello, el Gobierno de Castilla-La Mancha, a través de la Dirección General de Agenda 2030 y Consumo, ofrece una serie de consejos útiles a los ciudadanos a la hora de adquirir un juguete. Es muy importante tener siempre presente que las características de estos productos tienen que conjugarse con su seguridad y adecuarse a la edad y el desarrollo de madurez de los niños.

Asimismo, es conveniente realizar una elección adecuada en torno a criterios educativos y lúdicos, evitándoles dejarse llevar por la intensa publicidad que se lleva a cabo durante estas fechas lo que, en ocasiones, trae consigo conductas de cansancio temprano en su utilización o, incluso, de cierta decepción respecto a las expectativas que los anuncios publicitarios puedan haberles generado.

Por todo ello, desde la Dirección General de Agenda 2030 y Consumo de la Consejería de Desarrollo Sostenible se considera importante difundir una serie de recomendaciones necesarias a la hora de adquirir juguetes.

Principales recomendaciones

En primer lugar, se hace necesario observar, verificando el etiquetado, que los materiales con los que están fabricados los juguetes no sean tóxicos. También hay que vigilar la presencia de aquellas piezas del juguete que, por su pequeño tamaño, de forma separada, puedan suponer un riesgo para la seguridad de las niñas y niños, y del mismo modo, en lo que se refiere a partes afiladas o bordes cortantes.

Es importante asegurarse que la pintura incorporada a los juguetes no sea tóxica. Así como evitar adquirir juguetes que desprendan un fuerte olor, pues podría indicar que contiene elementos volátiles en el plástico que pueden ser nocivos para la salud.

Hay que procurar elegir juguetes cuya composición y diseño resulte lo más ecológico posible, atendiendo al impacto ambiental de los residuos que generen y también de los materiales empleados para su fabricación. Por ejemplo, son preferibles los juguetes hechos con materiales renovables (madera, cartón,…) que los fabricados mediante procesos industriales (materiales sintéticos, plásticos,…).

También se debe priorizar los juguetes participativos que permitan jugar con hermanos y amigos, es decir, compartir los juegos siempre que le sea posible. Así como evitar los juegos y juguetes de contenido bélico o sexista, cuánto más educativos mejor. No hay que olvidar que el juego es una forma de aprendizaje. Además de considerar también otro tipo de regalos como libros, ropa, material deportivo, etcétera.

Etiquetas e instrucciones

Es fundamental leer siempre las etiquetas, reglas e instrucciones del juego o juguete que se vaya a adquirir. Asimismo, en el etiquetado deben aparecer, al menos, el nombre y marca del producto; razón social y dirección del fabricante o importador o vendedor; advertencias de uso y restricciones de edad, en su caso; especificaciones de la potencia máxima, tensión de alimentación que necesita y consumo energético en juguetes de funcionamiento eléctrico.

Además, debe figurar de forma visible la marca CE que acredita que el fabricante o distribuidor garantiza que el juguete cumple con las exigencias esenciales de seguridad contenidas en las normas comunitarias.

Por último, hay que conservar el ticket de compra y pedir la garantía del juguete, si procede.

Para ampliar esta información o realizar alguna consulta al respecto, puede acudir a las Oficinas Municipales de Información al Consumidor (OMIC) o a las Oficinas de Atención al Consumidor de las Delegaciones Provinciales de Desarrollo Sostenible.

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