El sindicato CCOO ha incidido en la necesidad de adoptar en el marco de la región medidas para mejorar la formación con el objetivo de acabar con el «perentorio» dato que muestra que el 71,5 por ciento de personas en situación de desempleo en Castilla-La Mancha presentan una baja o muy baja cualificación, pues no tienen ningún tipo de titulación o simplemente estudios de Educación Secundaria Obligatoria (ESO).
Así lo ha expresado la secretaria de Formación para el Empleo de CCOO en la región, Encarna Sánchez, que ha alertado de la influencia que la cualificación de los castellano-manchegos tiene tanto en el sistema productivo regional como en su empleabilidad, pues las personas que tienen mayor formación presentan una tasa de desempleo del 14 por ciento.
Y es que tras tildar de «preocupante» que el 71,5 por ciento de las personas en situación de desempleo tenga esa baja o muy baja cualificación, la responsable de CCOO ha añadido que en el caso de los castellano-manchegos ocupados el 49 por ciento tienen también baja o muy baja cualificación, según los datos del mes de diciembre del pasado año que maneja el sindicato.
«Si vemos que las tasas de abandono escolar en la región están cuatro puntos por encima de media nacional, situándose en el 23,2 por ciento, y vemos el perfil de cualificación de los jóvenes, nos encontramos con que el 50 por ciento de los menores de 25 años tiene baja cualificación», ha denunciado.
Por contra, ha lamentado Encarna Sánchez, las mujeres castellano-manchegas tienen una mayor cualificación, pero sufren una mayor tasa de desempleo y los trabajos que encuentran son, en muchos casos, a tiempo parcial.
«Estos datos que no mejoran año tras año, o si lo hacen no es de manera significativa, no permiten decir que el perfil de cualificación de Castilla-La Mancha esté listo para hacer frente al futuro a la hora de abanderar modificaciones en el sistema productivo», al que también afectan los fuertes cambios sociodemográficos, que en la región se traducen en un envejecimiento de población, y las dificultades de captación y retorno y cualificación de los jóvenes, ha añadido.
REFORZAR LA FP
Y es que ha avisado de que el perfil de cualificación que presentan los trabajadores de la región no puede hacer frente a esas demandas que reclama el mercado. De ahí que la responsable de Formación para el Empleo de CCOO haya reclamado reforzar con recursos humanos y económicos la Formación Profesional, para superar las debilidades de cualificación que presenta la región y poder hacer frente a las modificaciones del sistema productivo.
De igual modo, ha demandado al Gobierno regional que refuerce con recursos el Observatorio Permanente de Cualificación para que, además de ofrecer estadísticas, dé respuesta a las necesidades formativas que presenta Castilla-La Mancha, a fin de que la región pueda tener mejores y más rápidas respuestas ante los rápidos cambios del mercado.
Por todo ello, Sánchez, ha solicitado al Ejecutivo autonómico que apueste de forma «decidida» por la formación para el empleo, con políticas sólidas que se desarrollen a lo largo de este año y que no sean sometidas a los «avatares presupuestarios ni los cambios políticos», mostrándose confiada en que los comicios del mes de mayo no supongan un parón en esta materia.
Dicho esto, la responsable de Formación para el Empleo de CCOO ha destacado que el sindicato ha aumentado a lo largo de este año la formación dirigida a los colectivos de baja cualificación, de tal modo que el 57 por ciento de los cursos ofertados tiene como destinatarios a 1.900 alumnos de este colectivo, que se han formado en un total de 108 cursos.
CASADO
En otro orden de cosas, preguntada sobre la propuesta formulada este domingo por el líder del PP, Pablo Casado, en Toledo, donde abogó por realizar «evaluaciones» a los funcionarios, la Secretaria de Formación para el Empleo de CCOO ha defendido que la evaluación de trabajo, en general, ha de estar en manos de los responsables de distintas áreas. En el ámbito de la formación, ha detallado, existen servicios de inspección al respecto que evalúan de forma constante.
«Son propuestas que llevan tiempo poniéndose sobre la mesa pero cualquier modo de cualificación ha de ser visto desde el diálogo social y ha de tener en cuenta la opinión de los agentes sociales», ha concluido.