El presidente del Partido Popular de Castilla-La Mancha, Paco Núñez, ha mostrado su firme compromiso de que cuando sea presidente de la Junta no cerrará los centros de educación especial de la región porque “creemos en el modelo educativo que desarrollan, por el beneficio que proporciona a los alumnos, por el trabajo que desarrollan los profesionales que trabajan en ellos y porque la lucha que tantos padres y voluntarios realizan en torno a ellos merece todo nuestro reconocimiento y nuestro apoyo”.
Núñez ha mostrado su “firme y rotunda apuesta por estos centros educativos” durante una visita al Centro de Educación Especial María Auxiliadora de Campo de Criptana, junto al alcalde Antonio Lucas-Torres y padres de alumnos, para interesarse por su situación ante la amenaza de cierre que planea sobre dichos centros como quieren el Gobierno de Page y Podemos con su Decreto de Inclusión Educativa.
“El Gobierno que presidiré va a ser un parapeto para que este tipo de centros nadie pueda cerrarlos”, ha dicho Núñez subrayando la historia de éxito del María Auxiliadora, “un centro pionero en la puesta en marcha de proyectos educativos, inclusivos y de atención al colectivo de personas con discapacidad”. Y es que según el presidente del PP regional, “los resultados que consiguen hablan por si solos y, por tanto, hay que saber encauzar a cada niño a aquel lugar en el que puede desarrollar al máximo sus capacidades”.
Gestión eficaz de las políticas sociales
Núñez ha asegurado que esta actitud de Page y sus socios de Podemos sigue la línea de la mantenida en la gestión de las políticas sociales, recordando como “han mirado para otro lado en esta materia y tienen a los colectivos del sector sufriendo por los impagos, en condiciones de inseguridad jurídica”. Así lo pone de manifiesto el hecho de que “la Plataforma por la Dependencia vaya a recurrir el último Decreto en esta materia y en dos ocasiones hayan dado a Page el Premio Gente sin Alma”, así como los datos que demuestran que “a día de hoy hay más dependientes sin reconocer de los que había hace cuatro años y mucha gente que desgraciadamente fallece esperando una resolución”, ha dicho.
Frente a esta situación, ha explicado Núñez, el PP va garantizar una gestión eficaz del bienestar social, pues “es fundamental que no haya dependientes esperando y que la dependencia se pueda adjudicar con eficacia” automatizando ciertos mecanismos para que los dependientes que ahora tiene que esperar 12 o 14 meses para disponer de su prestación la tengan automáticamente”. Para ello, ha recordado que cuando sea presidente aprobará una Ley del Tercer Sector que garantice que los servicios sociales estén perfectamente prestados y muchos de ellos gestionados directamente por las asociaciones que se dedican diariamente a este ámbito.