“Sin periodismo no hay democracia y sin democracia no hay periodismo”, así han presentado a la periodista Pepa Buena durante el acto del Día Internacional de la Mujer en Tomelloso, una profesional de la información con una dilatada experiencia en su ámbito y destacada en su labor de sensibilización de la mujer.
Tras agradecer el recibimiento del premio, la periodista realizó una trayectoria de su vida profesional, en la que explicaba cómo había nacido durante una época donde la Constitución definía la sociedad como igualitaria, pero cuya realidad fue diferente cuando se adentró en el mercado laboral.
Comenzó a trabajar en una redacciones con despachos llenas de hombres, y donde los altos cargos las ocupaban ellos. Por su parte, “las mujeres cuidaban de los familiares y enfermos, y de eso no hablaba la constitución”. La periodista hizo hincapié en cómo estos hechos han producido que las mujeres hayan tenido que esforzarse el doble para avanzar en sus carreras profesionales, ya que los cuidados eran “un trabajo gratis que interrumpía nuestras carreras”
Su siguiente paso por el periodismo le llevó a trabajar en un Programa de Sucesos, donde definían los casos de violencia machista como “crímenes pasionales”. “¿Dónde estaba la pasión ahí?”, enfatizó. Sin embargo, la aparición de Ana Orantes en televisión contando cómo su marido la había maltratado marcaría un antes y un después: las mujeres habían encontrado un nuevo espacio en el que tener voz.
“Esto es de libro [de historia], y empezó una batalla que acabó en 2004 con la Ley de violencia de género, un hito político; España fue pionera en dibujar un mapa por el que orientarse sobre lo que pasaba, y luego llegó la ley de igualdad”.
A pesar de los avances, Pepa recuerda cifras que alertan la situación de las mujeres: el 90% del cuidado de las personas lo realizan las mujeres, y el 70% de contratos parciales son para ellas.
Con respecto a la huelga, la periodista ha explicado que “ha habido que explicar muchas cosas sobre esta huelga, pero si esta huelga consiste en ver cuál es el hueco que ocupamos, solo la podemos hacer nosotras”. Según el Foro Económico Mundial, las políticas tardarían aún 100 años en implantar la igualdad; sin embargo, después de la movilización que está teniendo el 8M, “estoy convencida de que quizás volvamos a Tomelloso antes y acortaremos esos 100 años”.
