El Consejo de Gobierno ha tomado en consideración el Anteproyecto de Ley de acceso al entorno de personas con discapacidad acompañadas de perro de asistencia, que se remitirá ahora al Consejo Consultivo para su dictamen y que el Ejecutivo autonómico confía que salga adelante por unanimidad cuando llegue al Parlamento autonómico.
Así lo ha adelantado este miércoles en rueda de prensa la consejera de Bienestar Social, Aurelia Sánchez, quien ha señalado que la aprobación definitiva del texto, que actualiza la actual normativa de 1994, se sustanciará en el próximo periodo de sesiones.
Entre las novedades, la futura norma incluye no sólo los perros guía sino también los de señalización de sonidos para las personas con discapacidad auditiva, los de servicio para los discapacitados físicos, los de aviso para los enfermos de diabetes y epilepsia y los que acompañan a personas que padezcan espectro del autista.
Además, el texto amplía los lugares de acceso de los animales, de tal manera que garantizará el mismo al entorno laboral, a espacios de titularidad privad de uso colectivo como las comunidades de vecinos, los centros comerciales, religiosos o de culto, los espacios naturales donde se prohíba el paso a los animales, las piscinas -hasta el margen de la zona de agua-, museos, bibliotecas, cines, exposiciones o archivos.
La ley contempla también sanciones, que oscilan entre los 150 a los 10.000 euros en función de su gravedad, incluyendo entre las más altas del régimen sancionador el impedir el acceso o la permanencia de las personas usuarias con su perro de asistencia al entorno laboral o privar de forma intencionada a una persona de su perro.
HABRÁ UN REGISTRO DE PERROS
De la misma forma, prevé que el personal de las administraciones públicas pueda tener permiso retribuido para realizar un curso de formación para la utilización de un perro de asistencia, y que la persona con discapacidad que tenga un perro de asistencia jubilado pueda tener derecho a la utilización del transporte público «cuando sea totalmente imprescindible».
El texto detalla aquellos espacios «muy restringidos» en los que se impedirá el acceso a los perros de asistencia, como quirófanos, zonas de cuidados intensivos, zonas de manipulación de alimentos, piscinas o el interior de las atracciones de los parques.
En Castilla-La Mancha hay registrados 21 perros guía, aunque la demanda «es superior» a ese número, según ha comentado la consejera, que ha indicado que el texto prevé, asimismo, la creación de un registro de perros de asistencia junto con la persona que vaya acompañada del animal.
Aurelia Sánchez, que ha recordado que los perros de asistencia tienen que pasar un proceso de selección físico y sanitario y una etapa de adiestramiento en una entidad homologada oficialmente, ha destacado que el texto se ha hecho de la mano del CERMI, la ONCE, las consejerías de Sanidad; Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural, y Fomento; la FEMP, los agentes sociales a través del Consejo Asesor, el Consejo Regional de Municipios, el Consejo Regional de Consumo y los empresarios de la región.