El presidente de Castilla-La mancha, Emiliano García-Page, ha tenido palabras para valorar las afirmaciones del líder de su partido, Pedro Sánchez, que en declaraciones desde Murcia defendía que el trasvase desde el Tajo al Segura ha de seguir teniendo su «papel», extremo ante el que ha dicho que «todo el mundo está expuesto a las tácticas del momento y del sistema electoral».
A preguntas de los medios tras una rueda de prensa, García-Page ha dicho en todo caso que Sánchez prefiere «un modelo donde lo general es la desalación» y coger agua del trasvase «una excepción».
Tras asegurar que «hay gente a la que le cuesta matizar y precisar», el titular del Ejecutivo castellano-manchego ha indicado que «hay mucha gente que se acerca al problema del agua con dudas o ambigüedades«. «Pero tenemos claro desde Castilla-La Mancha que estamos evolucionando hacia un modelo en el que la desalación será lo normal», ha precisado.
García-Page ha defendido que el PSOE, también a nivel nacional, siempre ha apostado por la alternativa de la desalación frente a los trasvases, si bien ha insistido en que «hay gente que en Madrid, en términos políticos, aunque tiene clara la meta final, no tiene la determinación suficiente para ver el calendario» hasta llegar a esa meta.
«Yo he hablado mucho con Pedro y sé que con mucha claridad preferiría un modelo donde lo habitual sea la desalación. Pero se lo digo con claridad, como presidente, pongo mucho más por encima los intereses de Castilla-La Mancha a los de cualquier partido político, incluso del mío», ha subrayado.
