El presidente de Caja Rural Castilla-La Mancha, Javier López, ha elogiado el “buen posicionamiento” de las cooperativas agrarias de La Manchuela conquense en su primera visita institucional a Unión Campesina Iniestense, Santísimo Cristo de la Salud de Minglanilla, San Antonio de Padua de Villalpardo y San Isidro de Ledaña.
López recorrió estas cooperativas junto a miembros de sus Consejos Rectores, el vicepresidente de Caja Rural Castilla-La Mancha, Gregorio Gómez, el director de Relaciones Institucionales de la entidad, Miguel Ángel Escalante, el director territorial de Cuenca, Higinio Prior, y los directores de las oficinas de Iniesta, Alicia Romero, Minglanilla, José María Moya, y Ledaña, Clarencio García, respectivamente.
El presidente de Caja Rural Castilla-La Mancha afirmó que “las cooperativas agrarias viven un buen momento y tienen un futuro prometedor”.
Javier López alabó la renovación y modernización de sus instalaciones para adaptarlas a un mercado cada vez más competitivo, exigente e internacional.
Seguridad, solvencia y servicio
Por ello ofreció a estas cooperativas la “seguridad, solvencia y servicio” de Caja Rural Castilla-La Mancha, con más de 50 años de experiencia en el sector agrario.
“Llevamos más de cinco décadas cubriendo las necesidades crediticias de los sectores estratégicos de nuestra tierra, financiando al campo y a la economía real y productiva”, señaló.
Aseguró que “conocemos este mundo, con sus ingratitudes y satisfacciones”.
Y recordó que cerca de un 10 por ciento de las oficinas de Caja Rural Castilla-La Mancha son la única referencia financiera en las localidades donde se asientan.
También recalcó que la entidad genera relaciones duraderas y estables, lo que se traduce en casi 14 años de permanencia media de un cliente en Caja Rural Castilla-La Mancha, el doble que la media del sector.
El presidente de Caja Rural Castilla-La Mancha se mostró partidario de seguir estrechando lazos y sellando alianzas con las cooperativas agrarias, “motor económico de nuestros pueblos”.