spot_img
10.6 C
Tomelloso
sábado, 21 diciembre
spot_img

La “guerra de los Rose” de Tomelloso acaba en acuerdo por estafa 10 años después

La “guerra de los Rose” de Tomelloso acaba en acuerdo por estafa 10 años después

Belén Rodríguez / Lanza

Diez años después, con varios pleitos, denuncias cruzadas, y manipulaciones de escrituras, V.A.R.A, un vecino de Tomelloso de unos 60 años y su nueva pareja Z.M., han admitido ante la Audiencia Provincial que estafaron a la exmujer de él, J.C.B., para impedir que se quedara con la casa que le adjudicaron tras el divorcio, y se han conformado con dos años de prisión.

El acuerdo, que les obliga a pagar 3.000 euros de indemnización a la perjudicada, evitó el juicio penal en el que ha derivado un divorcio conflictivo que recuerda a la cinematográfica ‘La guerra de los Rose’, en este caso sin daños personales.

“Se obcecó en que su exmujer no se quedara con la casa y por eso hemos llegado hasta aquí”, ha explicado en la sede de la Audiencia José Tirado, el abogado que ha representado a la mujer, que al final se queda con una vivienda, en la que, pese a todo, no ha dejado de residir desde el divorcio, en mayo de 2007.

En el caso también están implicados dos amigos de los acusados -la pareja que en 2004 les vendió originalmente la vivienda unifamiliar a V.A.R.A y a su exesposa-, y con cuya connivencia se consumó la estafa (ambos aceptaron hoy dos años de cárcel).

La fiscalía provincial, que entró en este asunto a raíz de las denuncias del exmarido, pedía 4 años y medio por un delito consumado de estafa, mientras la defensa reclamaba 6 por lo mismo, y acusaban de coacciones.

Todo eso se ha traducido en el fallo final, en el que se ha aplicado la atenuante de dilaciones indebidas. “Mi patrocinada podrá por fin escriturar a su nombre la casa, algo que no  ha podido hacer en estos años”, dice Tirado.

En 2004 V.A.R.A. y J.C.B., entonces un matrimonio bienavenido, le compraron una vivienda unifamiliar a otra pareja y firmaron un documento privado en el que se recogía que la escritura a su nombre se formalizaría en 2008. Pero un año antes de esa fecha, la pareja se divorció y a la mujer se le asignó en sentencia el uso de la casa, que seguía escriturada a nombre de los primeros vendedores, circunstancia que su exmarido utilizó para intentar arrebatársela.

Primero lo hizo escriturando la casa a nombre de su nueva pareja, Z.M., con la anuencia de los vendedores, que simularon una compraventa. Con ese documento fueron a Aqualia y lograron que la empresa le cortara el agua a la exmujer, que vivía allí con su hija y dos nietos pequeños, y tuvo que estar un mes y medio acudiendo a una fuente pública a abastecerse.

También lo intentaron con la luz, pero no lo consiguieron. Después le pusieron un pleito de desahucio por precario y presentaron los documentos falsos en un juicio civil que se desestimó.

Acudieron a la Audiencia Provincial, hasta que el tribunal se dio cuenta que se habían falsificado documentos y ordenó investigar el caso, en paralelo la exmujer se querelló, y mientras los pleitos seguían, la nueva mujer pidió un préstamo por la casa de la ex, que no pagó, para que el banco se adjudicase la vivienda y echase a J.C.B.

Bogas Bus
+ Noticias

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí