El secretario general del PSOE en Castilla-La Mancha y presidente autonómico, Emiliano García-Page, ha marcado este sábado distancias entre su partido y el «populismo» en horas bajas, a su izquierda, y las «políticas de la derecha», en referencia directa a María Dolores de Cospedal, y su paso como presienta de Castilla-Mancha.
García-Page ha participado este sábado en la inauguración del 17 Congreso del PSOE de Ciudad Real, que reelegirá a José Manuel Caballero como secretario general y que será clausurado por el secretario federal de Organización, José Luis Abalos.
Por una parte, García-Page ha reconocido el papel de «oxigenación» de la sociedad que tuvieron las movilizaciones del 15-M, pero ha entendido que los partidos que han tomado sus referencias y que ahora están en el Congreso, se han convertido en «un partido más, con sus cuestiones internas, sus problemas, como todos».
Para García-Page, que en ningún momento ha citado a Podemos, ha sentenciado que «no siempre lo nuevo es bueno» y ahora esto se está confirmando.
Con respecto al PP y a su paso por el Gobierno de Castilla-La Mancha, el dirigente socialista ha puesto en valor los 28 años previos de Gobierno del PSOE y ha criticado los recortes que se llevaron a cabo en sectores como la sanidad, la educación o los servicios sociales.
Ahora, ha añadido, con la presentación de las enmiendas a los presupuestos regionales de 2018, se confirma que para el PP los recortes no eran una cuestión de crisis económica, sino «que lo hacen por convicción».
Frente a lo que sucede a su izquierda y a su derecha, García-Page ha valorado la trayectoria histórica y de avance social de los socialistas.»Tenemos nuestros problemas, nuestras historias», ha dicho, pero, a su juicio, «el PSOE se ha mantenido firme en sus convicciones y en la defensa de sus ideas a lo largo de su vida».
Además, siempre, ha añadido, con un sentido de Estado o de comunidad. García-Page, en este sentido, ha comparado la actitud del PSOE cuando facilitó la investidura de Mariano Rajoy como presidente del Gobierno con la mantenida por el PP de la región el pasado abril cuando se generó la crisis política por la negativa a aprobar los presupuestos de 2017.
REPETICIÓN
Por otro lado, García-Page ha insistido en que esa actitud política del PP en la región no ha cambiado y se repite en la actualidad, ha indicado con ataques hacia su persona, según se van acercando las próximas elecciones autonómicas de mayo de 2019.
Esto, significa, ha agregado, que «las cosas nos van bien en las encuestas» y ha animado al conjunto del PSOE regional a seguir trabajando en la misma línea que hasta, desde la unidad, poniendo como referencia la forma de trabajar que tiene el PSOE de Ciudad Real.
