La mujer de 46 años hallada muerta este lunes en Daimiel (Ciudad Real) junto a su hija de 18 años había contactado con el Centro de la Mujer de la localidad en dos ocasiones como consecuencia de que se estaba separando del presunto agresor, si bien no existían denuncias previas por violencia de género.
Según han confirmado fuentes municipales, así lo han señalado tanto la psicóloga del Centro de la Mujer que esta mañana se ha desplazado hasta la vivienda de la calle Arenas donde han ocurrido los hechos, como la Guardia Civil de la localidad.
Por otra parte, y según las mismas fuentes, testigos presenciales del suceso han visto salir al hombre que era la pareja de la víctima de 46 años del edificio con un cuchillo en la mano, momento en el que fue detenido por la Guardia Civil que había acudido alertada por los vecinos cuando pasaban pocos minutos de las nueve de la mañana.
El alcalde, Leopoldo Sierra se ha desplazado a la vivienda en el momento que ha tenido conocimiento del suceso y esta misma mañana se ha reunido con el resto de portavoces municipales con los que se ha acordado celebrar un pleno extraordinario esta tarde para decretar tres días de luto.
Las fallecidas residían en Daimiel, de donde era natural el presunto agresor, si bien eran naturales de Bienservida, un pueblo de la provincia de Albacete.
