La Interprofesional de Melón y Sandía de Castilla-La Mancha ha demandado que se ponga fin a los desequilibrios de la cadena alimentaria en relación a estos dos productos, considerando “inaceptables” los precios que perciben los agricultores en origen por melones y sandías.
Ante esta situación, hacen un llamamiento a las administraciones para que controlen los mecanismos de la cadena alimentaria mediante la aplicación de las nuevas herramientas, para poner fin a un problema “gravísimo” para el sector hortofrutícola.
Desde la Interprofesional advierten que las prácticas comerciales de la cadena de distribución están afectando “muy negativamente” a todo el sector, pues resulta “inviable” que requieran precios para estas frutas por debajo de los costes de producción más manipulación en origen (que se sitúan en un mínimo de 30 céntimos/kilo para sandía y 40 para melón). Los miembros de la Interprofesional insisten en que si la cadena de distribución quiere usar melón y sandía como productos reclamo en sus lineales “lo hagan a costa de su bolsillo”.
Advierten además que de mantenerse esta situación conllevará a medio plazo a una reducción notable de la producción de melón y sandía, lo que tendría unas consecuencias “nefastas” tanto para el sector agrario como para la propia cadena de distribución y, por supuesto, para la economía de numerosas localidades donde estos cultivos generan miles de puestos de trabajo y riqueza.
Asimismo, la Interprofesional demanda a comercios y grandes cadenas de distribución “equidad” a la hora de establecer los precios finales de ambos productos.
Por último, piden “responsabilidad” a todos los eslabones de la cadena alimentaria para que la producción de melón y sandía sea viable para todos, desde el origen al destino final.
La Interprofesional de Melón y Sandía de Castilla-La Mancha está compuesta por representantes de la Asociación Agraria-Jóvenes Agricultores (ASAJA); de Cooperativas Agro-alimentarias Castilla-La Mancha y de la Federación Empresarial de Ciudad Real (FECIR).
