Las diferentes administraciones de Castilla-La Mancha han vuelto a guardado un minuto de silencio para condenar «todos juntos» la violencia de género, tras el suceso ocurrido este miércoles en Campo de Criptana (Ciudad Real), en el que todavía está por confirmar si una mujer de 40 años de edad y sus dos hijos de 8 y 5 años fueron asesinados por el marido de esta y padre los niños, que falleció tras precipitarse desde la vivienda familiar.
Al acto central, celebrado en Toledo, han asistido representantes institucionales del Gobierno regional, como el portavoz, Nacho Hernando, y el delegado del Gobierno en Castilla-La Mancha, José Julián Gregorio, que ha señalado que aunque todavía no han recibido el informe del forense, «todo apunta, supuestamente, a un delito de violencia de género» que, de confirmarse sería el quinto caso de este año en la región tras los dos acontecidos en Seseña, otro en Mora (Toledo) y uno más en Daimiel (Ciudad Real).
«Ante cualquier caso de violencia machista, nadie se va a esconder y se va a trabajar para que la sociedad española, una sociedad madura, siga el derrotero para conseguir que la violencia de género, en un momento que no sea muy largo, pueda ser historia del pasado», ha manifestado Gregorio, que ha traslado su «más sincero pésame a los familiares de estas víctimas y, sobre todo, el pueblo de Campo de Criptana por este trágico suceso».
El delegado del Gobierno en Castilla-La Mancha ha asegurado que «nadie se va a esconder» y ha abogado por que «todas las administraciones trabajen en conjunto, desde la educación y los servicios sociales» para que «estos episodios no se vuelvan a reproducir» y «no se castigue a la región como lo está haciendo últimamente».
«Desde aquí, una reflexión de toda la sociedad española, de toda la sociedad castellano-manchega, de todos los hombres y mujeres de esta hermosa tierra, para que no se vuelven a reproducir estos hechos tan graves y que nos han llenado de tanto pesar», ha agregado Gregorio.
PACTO DE ESTADO PARA «ELIMINAR ESTA LACRA»
Por su parte, Nacho Hernando ha condenado «absolutamente un acto que desgarra el alma, un acto de cobardía» por el que el Ejecutivo autonómico ha querido acompañar al Gobierno de España en este minuto de silencio, con la intención de «mostrar el más firme apoyo a la colaboración institucional y a una firme apuesta por un pacto de Estado que elimine esta lacra de la sociedad».
«No puede ser que mueran más mujeres en este país de esta manera, y mucho menos niños y niñas como hemos visto en este caso tan lamentable», ha aseverado el portavoz regional, que ha afirmado que el Gobierno de Castilla-La Mancha «seguirá esforzándose, de la mano de todas las instituciones, de la justicia y de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, porque es intolerable que sigan ocurriendo estas cosas».
«Tenemos la firme convicción de que esta lacra, la violencia de género, ha de combatirse de manera frontal, por que si uno se pone de perfil automáticamente se convierte en cómplice, y ese no va a ser el caso del Gobierno de Castilla-La Mancha», ha sostenido Hernando.
ACTOS DE REPULSA EN TODA LA REGIÓN
Así las cosas, en diferentes municipios y localidades de la región se han celebrado actos de repulsa de la violencia de género, como en Talavera de la Reina, Albacete, Alcázar de San Juan o Valdepeñas, donde siguiendo la convocatoria de la Federación Española de Municipios se ha condenado esta lacra y se ha reclamado un pacto de Estado para frenarla.
