Cuatrocientos niños y niñas saharauis han sido recibidos esta mañana como ya es tradicional en los primeros días del mes de julio, cuando llega el contingente de menores procedentes de los campamentos de refugiados de Tindouf gracias al programa “Vacaciones en paz”, en el que la Diputación de Ciudad Real colabora muy activamente. Se ha establecido en esta ocasión el pabellón ferial de Ciudad Real como centro centro de recepción regional y hasta allí se han trasladado a primera hora las autoridades locales y provinciales para darles la bienvenida.
Pasarán el verano en Castilla-La Mancha, por lo que se evitarán los rigores estivales del desierto argelino gracias al “enorme corazón”, en palabras del presidente de la Diputación, José Manuel Caballero, de las familias de acogida. En la provincia se contabilizan 170, otros tantos hogares que hacen de Ciudad Real la demarcación más solidaria de España con los menores saharauis.
Ha asegurado Caballero que las Administraciones hacen la parte más fácil del trabajo pero también necesaria para que el programa se desarrolle, ya que en el caso de que la institución provincial corre con los gastos que ocasionan los desplazamientos desde Tindouf, que han supuesto en esta ocasión una inversión de 120.000 euros, aunque la ayuda total al pueblo saharaui asciende a 400.000.
Considera, sin embargo, el presidente de la Corporación provincial que es más destacable el componente humano que comporta el desarrollo del programa “Vacaciones en Paz”, porque no podría realizarse sin las familias de acogida, que cuidan a los menores saharauis como si fueran sus propios hijos o nietos.
Ha puesto de manifiesto la labor que llevan a cabo las Asociaciones de Amigos del Pueblo Saharaui y los coordinadores del programa. Ha dicho que cumplen una función fundamental así como los monitores que en el día de hoy han acompañado a los menores, para que los pequeños saharauis se incorporen con normalidad a la vida de nuestros pueblos y ciudades. Entiende el presidente de la Diputación, que ha estado acompañado por los vicepresidentes David Triguero y Gonzalo Redondo, que el indicador que dice realmente que ha llegado el verano a la provincia es ver a los niños y niñas del Sahara “correteando por las calles”.
Y ha concluido manifestando públicamente el compromiso de la Diputación de seguir colaborando con el objetivo de que el Programa “Vacaciones en Paz” se siga realizando y ha añadido que una de las prioridades de la gestión que llevan a cabo es fomentar la cultura solidaria.
Por su parte, Silvestre del Río, coordinador de “Vacaciones en Paz”, ha explicado que a lo largo del día de hoy los niños y niñas saharauis llegarán a sus hogares de acogida, diseminados por toda la región. Y ha desvelado que los que residirán en la capital y en la provincia han quedado emplazados para celebrar una convivencia con familias el próximo 29 de julio en la Dehesa Boyal de Puertollano.
Del Río ha agradecido la colaboración de las instituciones, entre ellas la Diputación de Ciudad Real, la que más destaca en el contexto nacional, según ha indicado Abdelahe Ahmed, representante del pueblo saharaui en Ciudad Real, quien ha añadido que nuestra provincia hace el mayor número de acogidas.