El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, se ha pronunciado por primera vez sobre el rechazo al Proyecto de Ley de Presupuestos de la Comunidad Autónoma tras el cambio de postura de Podemos, asegurando que pese a la «traición» que a su juicio supone la negativa de la formación morada el Gobierno autonómico seguirá adelante con sus compromisos «con determinación». «Nos costará quitarnos los puñales de la espalda, pero aún así tenemos claro el camino».
Durante el acto de toma de posesión de la nueva consejera de Fomento, Agustina García, García-Page se ha comprometido a «seguir cumpliendo» su programa electoral asumido en su discurso de investidura, programa que incluye las premisas propuestas por Podemos en el acuerdo por el cual le facilitaron el Gobierno.
«Mi gran objetivo es cumplir con esos objetivos, incluso a pesar de las decisiones contradictorias de quienes me apoyaron en su día. Serán muchos los días donde habrá problemas, pero muchos en los que podremos ejercer esperanza», ha subrayado, añadiendo que está «acostumbrado a las zancadillas».
En su opinión, Podemos no solo ha traicionado al PSOE y al Ejecutivo con su rechazo, sino que también «ha traicionado todo lo planteado por sus propios votantes».
Ha apuntado que «la forma y el fondo» de cómo Podemos escenificó su rechazo «explica todo lo demás». Así, ha dicho que hubiera bastado que un minuto antes de votar los presupuestos, desde la bancada morada le hubieran dicho que no apoyarían las cuentas, «y se habría parado la votación para discutir».
Por ello, ha asegurado estar «indignado» por los problemas que considera que provocará el hecho de que «miles de personas que tenían esperanza en estos presupuestos» vayan a «perder la esperanza».
«Un político se retrata en unos presupuestos, lo demás son mítines», ha dicho García-Page, antes de recordar que el pasado 23 de enero Podemos y el Gobierno pactaron estas cuentas generales.
RONDA DE CONTACTOS
A partir de ahora, García-Page ha avanzado que va a iniciar una ronda de contactos con «cientos de colectivos sociales» representativos de la región que han resultado «gravemente afectados» por la falta de presupuestos.
«Analizaremos las consecuencias, y cuando acabemos la ronda de contactos el Gobierno se reunirá de manera excepcional para plantear una decisión, para tener una iniciativa y para hacer una propuesta», ha sentenciado.
