Cooperativas Agro-alimentarias Castilla-La Mancha ha realizado una estimación de la cosecha 2017 de frutas de hueso en la región y, tras consultar con las cooperativas del sector, ha determinado que en esta campaña la cifra prevista de producción se sitúa en 55.171 toneladas en un total de 3.714 hectáreas cultivadas. Esta cifra supone un 6,51% más de producción respecto a la pasada campaña, cuando se obtuvieron 51.799 toneladas.
Según las previsiones, casi todas las frutas de hueso aumentarán su producción, destacando en valor absoluto el incremento en melocotón amarillo que pasa de 32.400 toneladas a 39.000 en esta campaña (un 20,40% más). Otras frutas de hueso de reciente cultivo en nuestra región como el paraguayo, nectarina o melocotón también experimentan un importante aumento, no tanto en valor absoluto pero sí en porcentaje, como es el caso del paraguayo, que pasa de 730 toneladas a 2.000 (un 174% más), la nectarina, de 400 toneladas a 1.000 (un 150% más), y el melocotón, que pasará de 5 toneladas en 2016 a 15 en 2017 (un 200% más).
Por último, especial atención merece el albaricoque, que disminuye considerablemente su producción, ya que la pasada campaña se saldó con 16.994 toneladas y la previsión para 2017 es de 10.856 toneladas, lo que supone una merma del 36,12%.
Esta importante reducción en el albaricoque se debe, tal y como afirma el técnico sectorial de Cooperativas, Jesús Ángel Peñaranda, “principalmente a las heladas primaverales (sobre todo la helada del 23 al 24 de marzo) y a que en el momento de la floración tuvimos más de 30 grados y lluvias (producido una merma importante de la cosecha por mal cuajado)”.
Excelente calidad
Entre los aspectos destacados de esta campaña, Jesús Ángel Peñaranda matiza que “la variedad de albaricoque búlida sigue siendo la más demandada, tanto para pulpa como para crema y mitades; para fresco, año tras año se va incrementando la cantidad, tanto en destino al mercado nacional como a la exportación, además de destacar el incremento de la demanda de albaricoque ecológico”.
Asimismo, se constata el estancamiento de la superficie plantada en la región de albaricoque y melocotón amarillo. En el caso del albaricoque se están sustituyendo las plantaciones viejas de variedad búlida (destinadas fundamentalmente a industria) por otras variedades de chapa roja (destinadas a fresco).
Respecto al melocotón amarillo, Albacete concentra el 95% del cultivo de la variedad pavía en Castilla-La Mancha, y sus comarcas de Hellín y Tobarra son unas de las principales zonas productoras de España.
“Lo que sí es común denominador en todas las variedades, afortunadamente, es la calidad”, afirma el técnico de Cooperativas Agro-alimentarias, “se prevé una calidad excelente que, sin duda, repercutirá en las ventas del producto”.