Vaya por delante que este artículo de opinión es personal y nunca puede ni debe anteponerse a las actuaciones en esta materia de la PAH.
Para valorar si es una solución o no la dación en pago tenemos que estudiar y observar dos modelos diferentes entre sí, pero con un mismo fin, “has hipotecado tu vivienda, pero no tu vida “. Por lo tanto distinguimos dos situaciones de afectados ante la Dación en Pago.
En la primera situación de una familia joven que durante la burbuja inmobiliaria es llevada en volandas por la propia sociedad y el director de Banco, no olvidemos la frase de “para que vas a pagar un alquiler, si puedes tener tu propia casa” que compra una vivienda sobrevalorada en exceso por los Bancos y que aumentaba vergonzosamente los beneficios de Bancos, Promotores, e Inmobiliarias, en perjuicio de la sociedad que consumía alentada por los poderes financieros.
Este tipo o situación familiar, si se entiende, que si su situación laboral, y por lo tanto su economía, se ha visto afectada por la estafa ( a quien no?) pretenda negociar con el Banco una dación en pago, ya que no puede pagar la hipoteca, como decíamos , por su situación laboral y económica, si a esto añadimos la estafa Bancaria, de clausulas suelo, y abusivas e intereses descomunales, que hacen impagable la hipoteca. Llegamos a la conclusión que es necesario y moralmente obligatorio negociar una dación, porque entendemos que “ hipotecas tu casa, pero no tu vida”.
Pero tenemos otra situación que pudiera afectar a menos gente, pero no por eso menos importante, y emotiva. Se trata de las situaciones familiares generalmente de más edad que ha construido su vivienda poco a poco como la situación económica del momento se lo ha permitido pero que a consecuencia del devenir de la crisis (estafa) bien por motivos laborales o cualquier otra situación compleja se vieron obligados a hipotecar su vivienda. La vivienda donde han pasado su vida, su historia, donde sus alegrías se mezclan con sus tristezas, donde han criado a sus familias, en definitiva la vivienda que tanto trabajo les costó construir y que en la mayoría de los casos no han llegado a terminar.
Estas dos situaciones, pueden ser distintas y distintas deberían ser las soluciones. Si en la primera tenemos la obligación moral de negociar y aceptar una dación en pago, siempre y cuando el afectado a si lo decida, (Yo me niego en rotundo). En la segunda tenemos la obligación de rescatar a las familias de la misma manera que se rescataron los Bancos y Cajas, es una medida justa o no?
Por qué de otra manera estamos faltando e ignorando la constitución en su art. 35, derecho a un trabajo digno y remunerado, y en su art. 47 el derecho de todo ser humano a una vivienda digna.
Si además tenemos en cuenta que los que han provocado esta situación los Bancos y los Banqueros es lógico y de sentido común, que sean ellos los que en mayor medida sustente esta situación como participes y responsables de ella.
Pero si además tenemos en cuenta que los Bancos ya han cobrado las hipotecas por medio de su venta a Fondos de Inversión, recordemos las Titulizadas, paquetes de hipotecas, divididos en bonos, y vendidos a Fondos de Inversión, consideramos ya no, legal, si no de sentido común que se paralicen los desahucios y se reforme la Ley hipotecaria como nos viene reclamando la Unión Europea y como desde la PAH venimos luchando tanto tiempo. Por lo tanto la Dación en Pago es o pudiera ser la solución menos mala, para quien? Para el Banco, si, pero y las familias que se quedan sin sus viviendas y no tienen alternativa habitacional.
Alguien tiene que parar esto y mucho me temo que va a tener que ser labor de la PAH.
Desiderio Madrid Cañas, PAH Argamasilla de Alba 08/02/2016