Fotos y vídeo: Pilar Valentín
Los ruidos de los cencerros despertaron este domingo a los vecinos de Ruidera. Como todos los meses de noviembre, los rebaños de vacas y merinas, procedentes de Teruel, avanzan por la Cañada Real de los Serranos, camino de Jaén.
Aún les queda un duro trabajo por delante, con noches frías a la intemperie y largas jornadas de pastoreo a lomos de los caballos. En junio regresarán a sus pastos en Aragón.