La Diputación de Ciudad Real, que preside José Manuel Caballero, ha aprobado la primera resolución parcial de la convocatoria de ayudas del Plan Extraordinario de Obras Municipales correspondiente al presente año de 2016, dotado en su totalidad con la cantidad de 4,4 millones de euros.
En esta primera resolución, cuya propuesta ha sido aprobada por la Junta de Gobierno celebrada esta mañana, se ha aprobado un montante que asciende a 3.343.943 euros a repartir entre 96 municipios de la provincia que han presentado sus correspondientes solicitudes y expedientes.
La resolución aprobada contempla también anticipos del 50 por ciento a los ayuntamientos que lo han solicitado como son Almagro, Moral de Calatrava, San Carlos del Valle, Villarrubia de los Ojos, Santa Cruz de Mudela, Arenales de San Gregorio, Poblete y Saceruela. En inversiones para vías públicas se han aprobado 1.429.257,98 euros de las que se beneficien un total de 40 municipios; para inversiones en saneamientos, abastecimiento y distribución de agua, la cantidad aprobada asciende a 1.064.623,66 euros para atender 28 solicitudes; y en inversiones de rehabilitación y reparación de infraestructuras en inmuebles municipales, la suma total aprobada es de 880.043,38 euros, para 28 municipios.
José Manuel Caballero ha recordado que el Plan Extraordinario de Obras prima a los ayuntamientos que tienen aldeas, por lo que muchas de estas inversiones repercutirán en las pedanías.
Hay que recordar que el plazo para presentar solicitudes a esta plan extraordinario finalizó el pasado 17 de octubre, por lo que en próximas fechas se resolverá las propuestas pendientes. Asimismo, como señaló el presidente de la Diputación en la presentación de este plan el pasado mes de septiembre, los consistorios debían presentar sus solicitudes para invertir en obras financieramente sostenibles.
El plan extraordinario de obras municipales se suma al plan ordinario, dotado con 8,8 millones de euros, por lo que la Diputación de Ciudad Real habrá invertido este año 15,2 millones de euros a atender las inversiones de los municipios de la provincia en materia de obras, independientemente de las ayudas nominativas que hayan podido recibir.