El PSOE y Podemos han votado en contra de la resolución presentada este jueves en el Pleno de las Cortes regionales por el Partido Popular, en la que, entre otras cosas, se pedía «aparcar» los planes de gestión de las Zonas de Especial Protección para Aves (ZEPA) para realizar «un estudio serio y concienzudo».
La resolución de los ‘populares’, presentada al término de un debate general sobre los planes de gestión, solicitaba que no se aprobase el documento sin el «apoyo de todos los interesados», y que se permitan las plantaciones de cultivos leñosos, eliminado prohibiciones y limitaciones de determinadas prácticas en cultivos herbáceos.
Previamente, el consejero de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural, Francisco Martínez, ha incidido en que en el reciente Consejo Asesor de Medio Ambiente (COMA) la propuesta del Ejecutivo alcanzó un 80 por ciento de consenso.
Martínez Arroyo ha asegurado que a él le gustaría que el plan contase con el consenso de todos y ha mostrado su «disposición absoluta» para mejorarlo y «resolver la inseguridad jurídica» en la que los ‘populares’ dejaron a los agricultores de Castilla-La Mancha.
El consejero ha pedido apoyo «para cumplir la ley» y ha instado al Partido Popular a que deje la demagogia y ayude a cumplirla. «O hacemos los planes de gestión o hablen con los tribunales que han dictado sentencia», les ha expresado.
JUNTA, «CONDESCENDIENTE»
El portavoz de Podemos, David Llorente, ha valorado que esta figura de protección sirva como «un instrumento financiero para conservar zonas y mantener la actividad agraria», pero ha señalado que el plan de gestión se ha enfocado por parte de la Junta respondiendo «prioritariamente a demandas cortoplacistas».
Llorente cree que el Gobierno autonómico ha sido «demasiado condescendiente» con las actividades que han dañado ya las zonas ZEPA, convencido de que la Administración regional debería haber sido «más activa a la hora de perseguir ilegalidades anteriores y adoptar medidas restauradoras».
El parlamentario de la formación morada, que ha admitido que el plan de gestión debe aprobarse obligatoriamente, también ha adelantado el rechazo de su formación a la resolución del PP, porque pide «que no haya regulación», lamentando, además, los «ataques injustificados» a las zona ZEPA por parte de los ‘populares’.
QUE NO DESTROCEN LA NEGOCIACIÓN
Por su parte, la diputada del PSOE Carmen Torralba ha reiterado la necesidad de aprobar los planes de gestión, que harán compatible la actividad económica, fundamentalmente agraria, con el espacio natural, aunque el PP «quiere vender lo contrario».
Torralba, que ha indicado que el Gobierno regional se está «esforzando» en hallar un punto de encuentro entre los agricultores y los ecologistas, ha pedido a los ‘populares’ que «dejen de alarmar y enredar con la falta de transparencia», y les ha pedido que «no destrocen la negociación» porque están haciendo «mucho daño» a los afectados.
De su lado, el diputado del PP Francisco Núñez ha asegurado que el presidente regional, Emiliano García-Page, quiere «arruinar el campo y esta tierra» y aunque ha admitido que los planes de gestión de zonas ZEPA hay que hacerlos, ha pedido que se hagan con rigor, haciéndolos compatibles con la actividad agrícola y ganadera y de forma consensuada.
EXPROPIACIÓN ENCUBIERTA
Sin embargo, ha lamentado, ninguno de estos principios se cumple, ya que los planes de gestión se basan en estudios de 2003 y el Gobierno «juega con las ZEPA cuando les viene en gana», como pasó con el aeropuerto de Ciudad Real o la zona cercana al Almacén Temporal Centralizado (ATC).
Además, ha incidido en que los planes no ofrecen seguridad jurídica, criticando que el Ejecutivo autonómico quiere «dejar a los agricultores con una mano delante y otra detrás». A su juicio, lo que la Administración autonómica está haciendo es «una explotación encubierta de la tierra a los ganaderos».