El presidente de Castilla-La Mancha y secretario regional del PSOE, Emiliano García-Page, ha asegurado este martes que sería «un fracaso» que se tuvieran que volver a convocar nuevas elecciones «pero más fracaso todavía que, por quedar bien, se hiciera un gobierno de apaño».
A preguntas de los medios por la nueva ronda de contactos convocada por el Rey Felipe VI con los partidos políticos, García-Page se ha mostrado partidario de que «se agotaran todas las opciones posibles de un gobierno», aunque no desde la tesis de que lo haya «para cumplir el trámite». «Y si desde el PP se quiere plantear así es un error», ha agregado.
El dirigente socialista, que ha presidido un Consejo de Gobierno itinerante en Torrijos (Toledo), ha incidido en que «hasta que no se culminen los plazos hay que seguir trabajando en opciones», y aunque le «gustaría» que el acuerdo alcanzado –con Podemos– en Castilla-La Mancha «fuera exportable», es consciente de que ni las opciones ni la aritmética «son las mismas».
«Algunos ya dijimos al día siguiente de las elecciones del 20 de diciembre que la aritmética era absolutamente perversa», ha manifestado García-Page, que ha confiado en que «pueda haber opciones a un acuerdo» para un gobierno «serio, sincero y que se base en la credibilidad», al que deberá llegarse «con concesiones entre unos y otros». «Si hay que hacerlo en reuniones discretas, sin presión pública, que se haga», ha añadido.
Emiliano García-Page ha dicho que él no «tira la toalla» y confía en que «todavía haya opciones de acuerdo» aunque «no a la catalana, que no me parece que sea un ejemplo conveniente» pues «se han sumado churras y merinas, gente de mentalidad conservadora con otra que está fuera del sistema, se han juntado solo con un monotema», el del proceso catalán.
Por otro lado, y en caso de que la campaña electoral hubiera de repetirse, ha expresado su deseo de que sea «totalmente distinta a las normales, con un presupuesto mínimo, y dando por hecho que el debate ya se sustanció».
El presidente de Castilla-La Mancha y secretario regional del PSOE desea que, de realizarse, esa campaña «no se convierta en un pimpampum de quién es el más culpable, «sino que se plantee «como una solución a los problemas de la gente».
