El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha asegurado que el proyecto de presupuestos que el Gobierno regional está preparando para el año 2017 es «a prueba de rupturas y de Montoro» y ha confiando en que los «avances» que este contiene sean lo suficientemente «sustanciosos» como para que haya acuerdo para su aprobación, a pesar de que Podemos diera «por muerto» el acuerdo de investidura que posibilitó que García-Page llegase a la Presidencia regional.
El presidente, en un desayuno informativo celebrado este miércoles en Toledo, ha manifestado que no hay una «fecha tope real» para la aprobación de las cuentas, aunque ha advertido que el Gobierno de Castilla-La Mancha «pone en suspenso todas las negociaciones y diálogos con colectivos» hasta que no «tenga claro» si tendrá ese apoyo presupuestario.
García-Page, que ha hecho hincapié en que no da «por muerto» el acuerdo con Podemos, ha insistido en que la hoja de ruta de la Junta castellano-manchega «va a depender de que los que dan por muertas las cosas resuciten», alertando de que, en caso de que no fuera así, se iría «a un bloqueo». «Si los que dan por muerto el pacto no se hacen creyentes y resucitan, va a haber muchos problemas para la gente que más lo necesita».
En este sentido, ha detallado que la no aprobación de los presupuestos haría «imposible» que se pudiera «avanzar en el rescate ciudadano», recalcando además que «quedarán por completo en la cuneta 46 grandes obras» en materia educativa, además de que «no se podrán bajar las ratios para contratar a 206 interinos más» o que «los funcionarios no podrán recuperar el 1,5 por ciento que Cospedal rebajó por su cuenta y riesgo».
Del mismo modo, ha incidido en que en los presupuestos se contemplaría «hacer muchos avances en sanidad», tales como «aumentar el año que viene 200.000 pruebas diagnósticas más, aumentar tratamientos de cáncer precoz de colon o atender a 60.000 pacientes más de los que previstos».
El PSOE «no va a ser determinante»
El presidente de Castilla-La Macha, Emiliano García-Page, cree que va a ser «viable» un entendimiento del PP con Ciudadanos y «seguramente» con el Partido Nacionalista Vasco (PNV) y «algún escollo añadido» que podría evitar las terceras elecciones, al tiempo que ha añadido que «aunque parece difícil, el PSOE no va a ser determinante».
El titular del Ejecutivo regional ha realizado estas manifestaciones durante un desayuno informativo organizado en Toledo, donde preguntado por si va a haber terceras elecciones, ha insistido no obstante en que el líder del PP, Mariano Rajoy, «busca las terceras elecciones, a ver si a la tercera va la vencida. Es muy español eso», ha matizado.
Tras tildar de «obscena e insultante» la actitud de Rajoy, que no buscaba gobierno porque se ha quedado a poquitos diputados y por eso fuerza unas terceras elecciones, ha señalado que aunque «no tenga mayor encanto ni sea más simpático ni le haya recibido como presidente de Castilla-La Mancha» no le «subestima», porque tiene un aprendizaje en política de más de 30 años.
«En estas terceras al menos Rajoy sí tiene claro que a la tercera le pueda ir la vencida y sería grave que Rajoy tuviera más fuerza, porque sería lacerante que hayamos contribuido a lavarles las vergüenzas, la corrupción y le estaríamos lavando la inmensa ola de recortes y desajustes que ha producido en España», ha advertido.
En este marco, ha vuelto a defender que el PSOE tiene más motivos que el PP para no pactar con los independentistas de derechas, porque si «no es coherente votar a un partido con una montaña de corrupción como es el PP, es inviable pactar con otro partido que tiene al menos la misma montaña de corrupción, no sé si aquí o en Andorra –en referencia a Convergencia Democrática de Cataluña- y que además quiere romper la igualdad de oportunidades».
Preguntado sobre si el PSOE no contempla abstenerse en la segunda vuelta para evitar terceras elecciones, García-Page ha dicho que «al PP hay que ganarle» y que él «no está en esas tesis de la abstención», al tiempo que ha añadido que le «ofende muchísimo cuando se sugiere que alguno estamos por ayudar al PP». «Me he pasado toda la vida desalojando al PP de la Alcaldía de Toledo y de Castilla-La Mancha», ha concluido.