El Gobierno de Castilla-La Mancha ha pedido este martes al delegado del Gobierno, José Julián Gregorio, que se disculpe por el «error grave» que cometió al decir que la espuma aparecida en el Tajo, a su paso por Toledo, se había generado en esta provincia; tras la aparición en el río –a la altura del Puente Largo del Jarama–, en Aranjuez– espuma «de parecidas dimensiones» a la que llegó a la capital regional.
En la rueda de prensa para dar cuenta de los asuntos del Consejo de Gobierno, el consejero de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo, ha apuntado la situación «lamentable» que presenta el Tajo desde el punto de vista del caudal, «que no alcanza los límites exigidos desde el punto de vista medioambiental».
El consejero de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural –enseñando una foto a los medios– ha indicado que la espuma aparecida en el río Tajo, a su paso por Aranjuez, pone de manifiesto la «metedura de pata» de Gregorio, para señalar que «toda» la competencia sobre la cuenca hidrográfica del Tajo es estatal.
A ello ha añadido que se pone de manifiesto que las políticas que se vienen desarrollando «no son las adecuadas» y que los trasvases dificultan que el río digiera los nutrientes que salen de todas las depuradoras que confluyen en el Tajo. «Es necesario contar con la posición del Gobierno de Castilla-La Mancha porque ninguna decisión de un río de tal importancia como el tajo se debe tomar sin la Comunidad Autónoma», ha agregado.
Así, ha querido mandar un mensaje de tranquilidad porque en Castilla-La Mancha «no se ha producido ningún tipo de vertido y de haberlo no es en la región». «La mayor parte de la espuma se genera también por el bajo caudal de río y porque con las lluvias el caudal ha aumentado y ha removido el fondo. «Vamos a pedir una investigación clara y precisa sobre qué está sucediendo y también sobre si ha habido algún vertido fuera de Castilla-La Mancha», ha concluido.