La consejera de Fomento del Gobierno de Castilla-La Mancha, Elena de la Cruz, ha avanzado que durante esta legislatura y sujeto al III Plan de Carreteras se van a volver a evaluar los proyectos de las tres grandes autovías por construir en la región, como son la que unirán Toledo y Ciudad Real, la Autovía del Júcar y la del IV Centenario.
Así lo ha asegurado en declaraciones a los medios momentos antes de participar en la Comisión de Fomento donde se van a detallar los pormenores de este Plan de Carreteras, añadiendo que la idea es ver «la conveniencia de los trazados» ya previstos e «intentar ahorrar algo en las arcas públicas».
«Estas grandes infraestructuras requieren una gran inversión y se harán cuando haya disposición presupuestaria, pero no las vamos a abandonar», ha enfatizado, remarcando que se licitarán obras «poco a poco» y priorizando actuaciones.
Ha dicho en este punto que los tramos de estas vías en proyecto vieron rescindido su contrato por el anterior Gobierno, lo cual ha acarreado tener que desembolsar varias indemnizaciones «de casi 40 millones de euros».
Ante esta obligación de pago, ha defendido que gracias al trabajo de su equipo se podrán ahorrar 25 millones de euros, y bastará con el pago de 14 para satisfacer estas indemnizaciones tras las negociaciones mantenidas.
De otro lado, ha puesto el acento en que por el anterior Ejecutivo quedaron 136 millones de euros por pagar en acciones dentro del Plan de Carreteras, de los que 64,6 se han pagado en los últimos meses por este Gobierno.