Una operación conjunta de la Policía Nacional y la Guardia Civil ha desarticulado un grupo organizado dedicado a la comisión de robos con fuerza en viviendas de Toledo y provincia, deteniendo a once personas y esclareciendo un total de 25 robos, por valor de medio millón de euros.
El delegado del Gobierno en la provincia de Toledo, Fernando Sanz, ha señalado en rueda de prensa que estos robos se perpetraban en viviendas unifamiliares que en el momento de la comisión del delito no estaban habitadas por sus moradores.
Las investigaciones se iniciaron a mediados de 2015 cuando se produjeron varios robos en la urbanización ‘Casa de Campo’ de Toledo, que dio el nombre a la operación, denominada ‘Campo’.
Las primeras pesquisas permitieron constatar la existencia de un grupo organizado detrás de estos hechos, así como identificar a su principal cabecilla, responsable de planificar los hechos y de concertar citas con otros individuos para perpetrar los robos y vender los efectos sustraídos.
Los integrantes de este grupo, altamente especializados, se valían de un inhibidor de frecuencias «de gran calidad» para cometer los robos, accediendo a los inmuebles fracturando puertas o ventanas previo escalo de los muros o vallas perimetrales.
Una vez dentro de los inmuebles, el grupo sustraía joyas, dinero y efectos variados que pudieran ser vendidos posteriormente para obtener un rendimiento económico.
NUEVE REGISTROS
Una vez identificados todos los miembros del grupo, agentes de la Policía Nacional y de la Guardia Civil realizaron nueve registros domiciliarios repartidos entre la capital y las localidades toledanas de Olías del Rey, Cabañas de la Sagra y Añover de Tajo, deteniendo al principal responsable y a siete de sus colaboradores. Poco después, se llevaron a cabo otros dos nuevos registros en Toledo, uno de ellos en un establecimiento de compraventa de oro en el que se vendían las joyas sustraídas, y se detuvo a otras tres personas.
Entre los efectos intervenidos en esta segunda fase destacan un potente inhibidor de frecuencias usado en los robos, numerosas joyas, más de 10.000 euros en efectivo, cerca de 60.000 dirhams –moneda marroquí–, veinte armas largas, dos armas cortas y electrodomésticos diversos.
Finalmente, esta misma semana se ha cerrado la operación, después de que los agentes hayan practicado una última detención.
Concretamente, los delitos cometidos han sido 23 robos con fuerza en viviendas y otros dos en establecimientos comerciales y se realizaron en las localidades de Toledo, Nambroca, Torrijos, Argés, Bargas, Olías del Rey, Añover de Tajo, Cabañas de la Sagra, Cobisa, Mocejón y Mascaraque.
La operación ha sido desarrollada de forma conjunta por agentes del Grupo Dos de la Brigada Provincial de Policía Judicial de la Comisaría Provincial del Cuerpo Nacional de Policía en Toledo y agentes de la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Comandancia de la Guardia Civil de Toledo. Estos también han contado con la colaboración de la UPR de la Brigada provincial de seguridad ciudadana de la Policía Nacional en Toledo y los GRS de la Guardia Civil, con sede en Valdemoro (Madrid).