Con, más o menos, tres cuartos de entrada, el Auditorio López Torres de Tomelloso acogió “Teresa de Jesús”, una producción de Algarabía Teatro que contó, además, con la colaboración especial de la Coral del Conservatorio. La obra, del Programa de Artes Escénicas de la Junta, está protagonizada por una única actriz, en el papel de la santa, Susana Sucena que está dirigida por Isidro Rodríguez Gallardo. Se trata de una producción que cuenta la vida de la Doctora de la Iglesia de la que en este 2015 se celebra el quinto centenario de su nacimiento.
Susana Sucena, durante las dos horas de la obra, va relatando en idioma del siglo XVI su vida, desde niña, cuando con su hermano Rodrigo quieren ir a tierras de moros para enseñarles a estos su fe. La obra comienza con un guiño al sufismo —y no es el único— con Teresa, vestida con una enagua de estameña girando sobre sí misma, como un derviche. No en vano, para muchos eruditos, el misticismo cristiano es hijo de esa corriente, pero eso es otra historia.
Como decimos, con solvencia, la actriz nos va relatando la de sobra conocida vida de la reformadora de Ávila, su enfermedad, sus arrebatos místicos, sus lecturas, su paso por la Encarnación y las fundaciones.
La Coral del Conservatorio de Tomelloso fue interpretando, perfectamente, piezas de la época que introducían y eran el nexo de unión de las distintas escenas. En el programa no figuran los cantables interpretados.
[justified_image_grid flickr_user=85117113@N04 flickr_photoset=72157661437372516]
