Los casos de gripe registrados en Castilla-La Mancha durante la segunda semana del año han situado la tasa en la región en los 166,4 casos por 100.000 habitantes, por encima del umbral epidémico, establecido en 66,5 casos por 100.000 habitantes.
Es la primera ocasión en la que se supera este umbral en la actual temporada, registrándose tasas superiores a la regional en las áreas de Talavera (516,4 casos por 100.000 habitantes), Toledo (192,7 casos por 100.000 habitantes) y Cuenca (176,7 casos por 100.000 habitantes).
Las tasas registradas en el resto de áreas en la segunda semana del año han sido de 154,1 casos por 100.000 habitantes en Ciudad Real; Guadalajara, 143,2 casos por 100.000 habitantes; y Albacete 66,8 casos por 100.000 habitantes.
El virus de la gripe circulante (del tipo B y AH3N2) está afectando especialmente, y hasta el momento, a los menores de 15 años. Según los expertos de Salud Pública de la Consejería de Sanidad y Asuntos Sociales, el pico máximo de la onda epidémica se espera para finales del mes de enero o principios de febrero. Hay que recordar que, hasta mediados de febrero, los grupos de riesgo todavía pueden acudir a su centro de salud para que les sea administrada la vacuna, en caso de que no lo hayan hecho todavía.
En este sentido, y tal y como informó ayer el consejero de Sanidad y Asuntos Sociales, José Ignacio Echániz, desde mediados de diciembre se han abierto ya 240 camas en los hospitales de la región y se han reforzado plantillas en urgencias con más de 200 profesionales sanitarios.
Sanidad y Asuntos Sociales recomienda a los ciudadanos que, ante los habituales síntomas de gripe estacional, acudan al médico de familia o pediatra de su centro de salud y eviten ir al hospital con patologías que podrían ser resueltas en los centros de Atención Primaria.