La Consejería de Bienestar Social ha ampliado el plazo hasta el 31 de diciembre de 2017 para que la cualificación de la totalidad de auxiliares de ayuda a domicilio, de personal gerocultor de residencias de mayores y de los cuidadores de centros residenciales de personas con discapacidad sea del 100% de las plantillas.
Según publica el Diario Oficial de Castilla-La Mancha (DOCM) y recoge Europa Press, el departamento que dirige Aurelia Sánchez explica que el Consejo Interterritorial de Servicios Sociales y Dependencia acordó de forma inicial que dicha cualificaicón fuera exigible al 100% de las plantillas a 31 de diciembre de 2015, si bien el plazo previsto no ha sido suficiente para lograr la completa cualificación de esos profesionales a nivel nacional.
Así, para garantizar la estabilidad del empleo en el sector, el Pleno del Consejo Territorial de Servicios Sociales y Dependencia, celebrado el 7 de octubre de 2015, acordó ampliar ese plazo hasta el 31 de diciembre de 2017, previendo una habilitación excepcional para los profesionales de mayor experiencia y edad.
En base a este acuerdo, la Consejería de Bienestar Social ha modificado órdenes del anterior Ejecutivo ‘popular’, determinando también que el personal auxiliar de ayuda a domicilio en activo que se encuentre sin cualificar el 1 de enero de 2016 deberá iniciar o completar la formación necesaria para obtener el título correspondiente de formación profesional o el certificado de profesionalidad.
De igual modo, y entre otras cuestiones, ha establecido que a partir del 1 de enero de 2016, los profesionales de nuevo ingreso en servicios de ayuda a domicilio deberán contar con la cualificación prevista.
En cuanto a las condiciones mínimas de los centros destinados a personas mayores en Castilla-La Mancha, Bienestar Social lo ha modificado de tal modo que los requisitos de cualificación del personal gerocultor o auxiliar previsto exigibles al 100% de la plantilla de la categoría profesional de gerocultor o auxiliar de la entidad prestataria se amplia hasta el 31 de diciembre de 2017 o a la finalización de los procedimientos de acreditación de la competencia profesional que estén iniciados en esa fecha.
El personal en activo con funciones de gerocultura que se encuentre sin cualificar el 1 de enero de 2016, deberá iniciar o completar la formación necesaria para obtener el título correspondiente de formación profesional o el certificado de profesionalidad.
A partir del 1 de enero de 2016 deberán contar con la cualificación prevista los profesionales de nuevo ingreso en las residenciales de mayores. Por nuevo ingreso se entiende las contrataciones realizadas a profesionales que acceden por primera vez a un puesto de trabajo con funciones de gerocultor/a.