La directora del Festival Internacional de Teatro Clásico de Almagro, Natalia Menéndez, ha hecho una llamada «clara, transparente y apetecible» al espectador para que responda a todos los esfuerzos que la organización, desde la dirección hasta las compañías, hacen para ofrecerle la mejor propuesta cultural del verano en la provincia de Ciudad Real y en Castilla-La Mancha, además de una de las más interesantes del país.
Así lo ha explicado Menéndez en una entrevista concedida a Europa Press y en la que, preguntada sobre el secreto para mantener la calidad del certamen dramático en momentos de crisis y de recortes al mundo de la cultura, ha señalado que «todos nos hemos apretado el cinturón, desde la dirección y todo el equipo de gestión, hasta las componías y los técnicos. Siempre pensando en beneficiar al espectador, para el que cada vez hacemos más por tratar de cuidarle».
Precisamente por esos esfuerzos, ha incidido en que una vez que se ha diseñado pensando en él, «el espectador también tendrá que demostrar si quiere que se siga apostando por él» ya que, entre las ventajas que se le ofrecen, además de la amplia programación, se encuentra el mantenimiento de los precios de años anteriores y los descuentos a jóvenes, mayores y grupos, el Día del Espectador –que este año se traslada al jueves para que el público disponga de una oferta más amplia.- y la reducción de tarifas para los desempleados.
UN REGALO
Si los precios y descuentos son interesantes, más aún es la oferta que se le brinda al público, resalta la directora del festival, que ha recordado que este año se celebra con el lema ‘Un clásico, un regalo’, entendiendo el regalo como algo que aparentemente es efímero pero que permanece para siempre en la vida de quien lo recibe.
«Eso es lo que ocurre con el teatro clásicos: después de ver un Otelo, Hamlet, ‘El castigo sin venganza’ o ‘La discreta enamorada’, por poner unos ejemplos, nunca se olvidarán», ha matizado Natalia Menéndez, quien subraya que en esta edición se han presentado más de 300 propuestas de alrededor de 20 países.
Respecto al conjunto de la programación, ha reseñado que hay un predominio claro para la comedia, aunque también se piensa en las personas que no sólo quieren reír sino también conmoverse, y para ello hay tragedia y drama.
Además, en esta trigésimo séptima edición hay otros alicientes como que se amplía a 25 espectáculos la programación familiar y hay ocho países invitados al certamen, siendo Italia el de honor, entre los que se encuentran Francia, Reino Unido, Dinamarca, Colombia o México, entre otros.
INTERNACIONALIZACIÓN
Y es que, como ha reconocido la máxima responsable del festival, desde hace unos años hay una mayor apuesta por la internacionalización de este certamen dramático, «ya que esa es su vocación como su propio nombre indica». «Pero también por los jóvenes creadores tanto en el certamen Almagro Off como en la programación oficial», ha añadido.
Un ejemplo es que, de las cuatro coproducciones en las que este año participa el Festival Internacional de Teatro Clásico, por primera vez una de ella es con otro país, en concreto Italia, a través de ‘Amleto’, que se podrá ver en la Antigua Universidad Renacentista de Almagro (AUREA).
También coproduce, en este caso con compañías nacionales, ‘Bobas y Gallegas’ en el Corral de Comedias, ‘La hermosa Jarifa’ en el Espacio Miguel Narros –que por primera vez aparece en la programación con esta denominación– y ‘Los brillantes empeños’ en el Corral de Comedias.
También hay una apuesta clara por estrenos, entre los que Natalia Menéndez ha citado, a modo de ejemplo porque son muchos, el de quien ya es un clásico exitoso en el festival, El Brujo, con ‘La luz oscura de la fe’ que se podrá ver en el Espacio Miguel Narros; o el de la Compañía Nacional de Teatro Clásico con ‘Donde hay agravios no hay celos’.
