El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, ha asegurado este viernes que el proyecto de ley de Presupuestos Generales del Estado (PGE) al que ha dado luz verde el Consejo de Ministros son «la peor noticia para la clase trabajadora», y ha pedido apoyo ciudadano «para que sean los últimos de Mariano Rajoy».
Sánchez, que participa en Albacete en la segunda de las asambleas abiertas que el Partido Socialista va a llevar a cabo por el país, junto al secretario regional del PSOE, Emiliano García-Page, se ha referido así al Proyecto de Ley de Presupuestos para el 2015, convencido de que el Ejecutivo «vuelve a subir los impuestos y a recortar el Estado de Derecho y de Bienestar» mientras aprueba una amnistía fiscal.
Antes de comenzar con el turno de intervenciones ciudadanas, el dirigente socialista se ha referido a este asunto, ha asegurado que, al margen de esto, «entre todos podemos hacer posible que estos sean los últimos presupuestos de Mariano Rajoy como presidente», y por eso su partido ha propuesto una «amplia movilización ciudadana, para ganar los ayuntamientos, en Castilla-La Mancha y el Gobierno de España».
Ya a preguntas de los asistentes, en el ámbito económico y laboral se ha comprometido a hacer una reforma fiscal de izquierdas, de tal forma que «los grandes patrimonios y fortunas van a empezar a pagar más que los autónomos y las pequeñas y medianas empresas». «La principal asignatura pendiente como PSOE es hacer una reforma fiscal de izquierdas, y me comprometo con ello», ha manifestado.
NUEVO ESTATUTO DE LOS TRABAJADORES
Asimismo, ha adelantado que «en los próximos meses» el PSOE presentará un «nuevo Estatuto General de los Trabajadores» que reivindique el papel de los sindicatos, «que también tienen que renovarse y hacer las cosas de distinta manera», que recupere la negociación colectiva y que garantice un salario mínimo «como el 60 por ciento del salario medio del país».
Sánchez, que ha defendido esta iniciativa teniendo en cuenta que esto es algo que la reforma laboral del PP «desmantela», ha señalado que «en breve» también se presentará una propuesta «para rebajar a la mínima expresión las diferencias salariales» entre los trabajadores de las empresas y sus cargos directivos.
También ha hablado de la consulta catalana, para incidir en que el presidente de la Generalitad, Artur Mas, «tiene que respetar la legalidad» y recordarle al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, que «con la legalidad no basta» y que «hay que proponer una solución política». «El Gobierno de España sabe que nos tiene a su lado en el respeto a la legalidad».
«Lo que tiene que hacer Rajoy es afrontar ese proceso de reforma constitucional que le estamos pidiendo» pero «que votemos todos, catalanes y el conjunto de España, una reforma constitucional», ha remarcado Sánchez.
ELIMINAR «COPAGOS Y REPAGOS»
Sin embargo, la sanidad, la educación y los temas sociales han sido los que han copado la mayor parte de las preguntas de los asistentes, con quienes se ha comprometido a eliminar los «copagos y repagos en la sanidad pública» dentro de la reforma fiscal y a recuperar «una de las cosas más crueles de Rajoy», como fue la de «quitar la cotización social de personas que cuidan a enfermos de alzheimer».
En este contexto, se ha referido a la ley del aborto para lamentar que el PP acometiera tanto esta norma como su retirada «como un cálculo electoralista», lo que demuestra «la falta de principios del Partido Popular».
En materia educativa, y considerando «más que evidente» lo que el PSOE va a hacer con la LOMCE, Pedro Sánchez ha compartido la necesidad de «llegar a algunos acuerdos» con el PP, al que ha ofrecido un «pacto por la estabilidad, la excelencia, la equidad y la igualdad en el sistema educativo».
Además, ha avanzado, preguntado por un niño que había entre el público, que cuando el PSOE acometa la reforma de la ley educativa recuperarán cosas «como la enseñanza en artes, cultura y humanidades, que está cercenando el Gobierno de la derecha». «Las asignaturas chulas que tienen que estar en el sistema educativo», ha respondido al chaval.
«¿ES POSIBLE QUE DIMITA EL OBISPO DE ALCALÁ?»
En cuanto a los acuerdos con la Santa Sede, ha subrayado que su intención es la derogarlos «sin ningún tipo de revancha» y también «revisar los privilegios fiscales de la iglesia», convencido de la necesidad de «aprobar una ley de libertad religiosa para que todas las religiones puedan contar con los recursos y garantías suficientes para desarrollar su labor».
En este punto, y tras varios comentarios críticos sobre manifestaciones del obispo de Alcalá, Juan Antonio Reig, un sacerdote presente en el acto, le ha interpelado por esas alusiones, a lo que Sánchez ha respondido preguntándose si «no es posible que dimita» este obispo.
A renglón seguido, ha aclarado al religioso que no interpretase de sus palabras «nada más que un espíritu crítico hacia los que desde cualquier estamento utilizan argumentos absolutamente falaces para defender sus tesis».
Sánchez, que se ha comprometido con varios ciudadanos a profundizar a través de correo electrónico diversas cuestiones, también ha hablado de autónomos, de inmigración, ha asumido la responsabilidad de modificar la ley hipotecaria, ha destacado que la posición del PSOE es «contraria» al ‘fracking’, ha dicho que intentará que los planes nacionales de vivienda impulsen la Vivienda de Protección Oficial y ha adelantado que «en breve» aportarán una solución para el sector eléctrico.
«COSPEDAL, MÁQUINA DE HACER VOTANTES DEL PSOE»
El secretario general del PSOE se ha referido en varias ocasiones a la situación en la que la presidenta de Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal, «ha dejado» a esta región, convencido de que la dirigente ‘popular’ es «una máquina de hacer votantes socialistas», como le ocurrió a un amigo suyo, que solo se persuadió de hacerse del PSOE gracias a ella.
Precisamente, ha iniciado su presentación asegurando que el secretario regional del PSOE, Emiliano García-Page, va a ser el «próximo presidente de Castilla-La Mancha», porque «en tres años en la Junta de Castilla-La Mancha han pasado muchísimas cosas a peor». «Hay mucha gente, como Emiliano y yo, que quiere que vuelva a ganar el PSOE», ha destacado.
El dirigente socialista se ha mostrado seguro de que «es posible» recuperar derechos en esta región. «Aquí han sido tres años de Cospedal, lo que os pido es que no sean más», ha solicitado a un auditorio que ha aplaudido especialmente la sugerencia de una ciudadana que ha pedido a Sánchez que «todas las cosas que salgan en los programas electorales sean cosas que vayamos a cumplir».