El secretario general del PSOE de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha asegurado que su partido en el Gobierno «puedo cometer errores», pero «nunca cometerá el error de estar lejos de la gente», y los socialistas «no deben sentir vergüenza de lo que se hecho en la Comunidad Autónoma durante 28 años de Gobierno, ya que «se puso a la región patas arriba mientras que Cospedal lo que ha hecho es ponerla patas abajo».
Igualmente, el líder de los socialistas castellano-manchegos ha lamentado que Cospedal «durante estos años de Gobierno haya estado mucho más ocupada y preocupada por los líos de su partido y el caso Bárcenas que por esta tierra, y que siempre haya puesto por delante los intereses de su partido a los de la Comunidad Autónoma», ha informado el PSOE en nota de prensa.
«Se trata de gobernar con principios y el primer principio y fundamental es querer a esta tierra y para querer a esta tierra hay que conocerla y para conocerla hay que pisarla», ha afirmado.
Por otra parte, García-Page ha criticado que la gran inversión de la legislatura «sea un cementerio nuclear». «Van a gastar 900 millones de euros para traer la basura radioactiva a Cuenca».
Con ese dinero, ha asegurado, «se podían acabar las obras de todos los hospitales de Castilla-La Mancha, incluido el de Toledo».
En este sentido, ha señalado que «queda claro que hay dinero para lo que quieren, lo que ocurre es que las prioridades deben estar claras».
Sobre la zona de la Jara, el socialista ha dicho «que está sufriendo un alto índice de desempleo, el Gobierno se comprometió a dejarse la piel por esta comarca, que necesita inversiones mucho más que otras zonas de la región».
«Toda la gente que quiera que Cospedal se vaya solo tiene una opción, y es el voto al PSOE», ha dicho García-Page, que ha lamentado que «con el pucherazo electoral va a ser muy difícil que en las Cortes de Castilla-La Mancha pueda entrar una tercera fuerza política y 300.000 votos podrían ir directamente a la basura y no servir para cambiar las cosas»