Del total de las intervenciones gestionadas por el Servicio de Atención de Urgencia (SAU) 1-1-2 durante 2013, casi el 63 por ciento tuvieron como fin la activación de algún recurso sanitario, siendo el sector de actuación que más movilizaciones llevó a cabo durante el pasado ejercicio.
Éste es uno de los datos que se desprende de la memoria de actividad 2013, elaborada por el Servicio de Atención de Urgencias 1-1-2 de Castilla-La Mancha, organismo perteneciente a la Consejería de Presidencia y Administraciones Públicas.
Tras el sector sanitario, el segundo de los grupos de intervención que experimentó un mayor número de activaciones desde el SAU 1-1-2 fue el sector integrado por los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad.
De hecho, este segundo grupo de intervención recibió algo más del 25 por ciento de las llamadas “procedentes” llegadas al Centro Coordinador de Emergencias durante 2013, lo que supuso la activación de los agentes de la Guardia Civil, el Cuerpo Nacional de Policía o la Policía Local.
Por su parte, el área multisectorial fue el tercero de los grupos que recibió un mayor número de movilizaciones. En este grupo de activación se agrupan aquellas actuaciones que llevan a cabo operarios de Obras Públicas, voluntarios de Protección Civil o los técnicos de las compañías de suministro eléctrico, agua, gas, etc.
En este sentido, el 7 por ciento de las intervenciones de urgencia gestionadas por el Servicio de Atención de Urgencias 1-1-2 tuvieron como consecuencia la activación de alguno de estos profesionales y técnicos.
En último lugar, el área relacionada con extinción y salvamento recibió el 5 por ciento del total de las intervenciones gestionadas por el Centro Coordinador de Emergencias durante 2013. Así, los cuerpos de bomberos y del Servicio de Extinción de Incendios Forestales, estos últimos durante la época estival, fueron los profesionales activados con este tipo de comunicaciones llegadas al 1-1-2.
Alertantes accidentales
Por lo que respecta a la tipología de los alertantes, es decir, las personas que llamaron al Centro Coordinador de Emergencia para comunicar un incidente, hay que señalar que la mayor parte de las llamadas se produjeron desde instituciones sanitarias (centros de salud, hospitales, etc.), un 29,4 por ciento del total, con el fin de solicitar traslados o asistencias especializadas.
Los alertantes accidentales, aquellos que han sido testigos del incidente o se encontraban cerca pero que no tienen relación directa con el suceso o los afectados, realizaron el 20,7 por ciento de las llamadas al SAU 1-1-2 durante 2013.
Casi el mismo porcentaje de las comunicaciones recibidas -un 20,6 por ciento- se produjeron por parte del propio afectado, que solicitaba ayuda al Centro Coordinador. Personas del entorno del propio afectado realizaron el 17,2 por ciento del total de las llamadas para alertar de un incidente.
Por último, el 12 por ciento de los alertantes se engloban en el capítulo de “otros”, en el que se agrupan las comunicaciones llegadas desde los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad, bomberos, otros organismos, así como las transferidas desde otras comunidades autónomas.