El cuerpo técnico y jugadores de la pasada temporada del Tomelloso C. F. convocaron a los medios en la noche de este jueves para hacer pública la situación en la que se encuentra su relación con el club y responder a las declaraciones de Francisco Sánchez, actual presidente de la entidad.
Luis Marcelino Sánchez, primer entrenador de la pasada temporada, señala que en el mundo de fútbol, explica, hay tres aspectos, el humano —el más importante para él, apostilla—, el económico y el deportivo. Él como máximo responsable deportivo del equipo durante la temporada pasada asume la responsabilidad de los malos resultados, pero que aguantó la caótica situación del equipo porque estaba rodeado de amigos, obligado por ello a acabar la temporada, aún a sabiendas (él era de los pocos que lo sabían, asegura) de que no iban a cobrar ni un euro.
El ex entrenador asegura que no están en contra del Tomelloso C. F., que sienten como suyos los colores y la ciudad. Vienen a denunciar, afirma Sánchez, que el club esté en manos de determinadas personas que se permiten hacer ciertos comentarios, y además, que se regodeen diciendo que no les van a pagar por considerarlos responsables de la pésima situación deportiva de la temporada pasada.
Cuenta como la temporada pasada se conformo en base a un proyecto faraónico, en el que se incluía una residencia para los deportistas y la confección de una plantilla con unos salarios de 240.000 euros mensuales. Asegura que se incumplieron las promesas hechas para atraer a los jugadores. Incluso, señala, no se abonaban las cantidades para manutención pactadas, con lo que algunos futbolistas estaban a base de sopa varios días. Sánchez relata que dada la precariedad de muchos futbolistas hubo quienes, anónimamente, les compraron un horno, o se los llevaban a sus propias casas a comer o a cenar, o a restaurantes.
La situación, hizo que fueran desapareciendo jugadores poco a poco, asegura Luis, explicando las dificultades por las que pasaban algunos de los futbolistas argentinos para regresar a su país y como eran los técnicos los que tenían que llevarlos con sus autos particulares al aeropuerto. Todas estas cosas no han salido antes a la luz, explica Sánchez, por el gran compromiso de los chicos, tanto los argentinos como los nacionales que quedaron y porque el cuerpo técnico y los capitanes, se dedicaron durante la segunda vuelta a apagar fuegos.
Hablando de esa segunda vuelta, el técnico recuerda, que se cumplió con el objetivo de quedar fuera de los puestos de descenso, pero que los resultados y situaciones de otros equipos los arrastraron a la bajada de categoría. Señala que le propusieron la renovación para la siguiente temporada, pero que él la rechazó.
En el aspecto deportivo, asegura el técnico, se le prometió el fichaje de jugadores, algunos que él conocía, incluso había cinco jugadores dispuestos a venirse a Tomelloso para salvar la situación. Con los fichajes oportunos la situación se hubiese salvado, apostilla Sánchez. También afirma que en las diez últimas jornadas prácticamente se incumplía el reglamento ya que no había suficientes jugadores de la primera plantilla de inicio y algunos partidos los tenían que terminar con futbolistas lesionados por no tener banquillo para realizar los cambios. Ha calificado de patética la situación del final de temporada.
Los reconocimientos de deuda, mostrados a los medios, consignan seis mensualidades, por lo que Sánchez considera que el actual mandatario del Tomelloso no puede ir diciendo que no es tanto dinero. El entrenador asegura que la deuda asciende a más de 60.000 euros a jugadores y técnicos. Califica de mala persona al presidente actual, por afirmar públicamente que los reconocimientos de deuda los firmó para que se jugase el partido en Socuéllamos, asegurando Sánchez que de esas palabras se deduce que en ningún momento tenía intención de pagar.
También achaca el dirigente, relata Luis, que el Ayuntamiento no ha cumplido con sus compromisos económicos, hecho que desmiente el técnico asegurando que el Consistorio ha abonado hasta la última peseta. Incluso tampoco es cierto, como asegura el presidente, que el equipo juvenil de División de Honor no haya recibido subvención, ha recibido 12.000 euros afirma Sánchez, de la Diputación.
En cuanto a las cuestiones personales y a determinadas afirmaciones, hay que tomárselas con humor, asegura Sánchez, haciendo un resumen de los logros conseguidos por el equipo técnico en la época de futbolistas.
Después tomó la palabra Luis Miguel Rodriguez, segundo entrenador, suscribiendo las palabras de Sánchez y asegurando que ellos como profesionales no han cobrado y le pide al presidente del Tomelloso C. F. que no mienta y que reconozca que les deben el dinero por el trabajo realizado. Es hora, remarca “Luismi”, de que la ciudad conozca la situación del Tomelloso C. F., que es muy triste y que a los que están en la mesa, les duele el Tomelloso.
Emilio Logroño, entrenador del equipo que jugaba en división de honor, reitera las palabras de quienes han precedido y asegura que no solo no han cobrado pos su trabajo, sino que encima les ha costado dinero, él mismo tenía que hacer 80 kilómetros diarios desde Alcázar. Considera grave la descalificación hacia su persona, asegurando que cogió el equipo juvenil ya en División de Honor, que asume los resultados como profesional, que se podía haber hecho más, pero que estuvo condicionada por los medios de que disponían, que no eran los más idóneos. Ha alabado el esfuerzo de los jugadores y los padres, el desembolso económico realizado por muchas familias al no cumplirse las promesas hechas por el club. Dice sentirse muy orgulloso del equipo y del trabajo, pero que se sintieron abandonados por la directiva. Asegura que él está aquí para lo que considera justo, cobrar lo que se le debe por el trabajo que ha realizado y que no van a permitir mentiras ni descalificaciones.
Julián Espinosa, técnico del Tomelloso B, corrobora lo dicho por sus compañeros, mostrando de nuevo los papeles, pero ha querido responder a la afirmación del señor Sánchez de que ellos han estado por la cartera y no por el escudo, diciendo que si hubiese sido de de esa forma, ninguno hubiese continuado en el club después de navidad, pues ya se les debía dinero. Ha asegurado que todos son gente de palabra y comprometidos con una causa. Ha reafirmado el compromiso de los técnicos y de los jugadores de la anterior temporada.
Asegura que ha está situación se ha llegado por tener al frente del club a una persona desconocedora de la gestión de un equipo del fútbol y del Tomelloso C. F. Así mismo, ha alabado la profesionalidad del cuerpo técnico y ha puesto en valor el trabajo realizado. Afirma su deseo de que esta denuncia pública sirva para que esta situación no se repita en nadie de los que actualmente se dedican al fútbol.
David Martínez, uno de los capitanes, habla en nombre de los jugadores, considerando inciertas las afirmaciones del presidente del club que les acusaba de fingir lesiones para no jugar los partidos. Ha asegurado que el ambiente que se vivía en el equipo no era el mejor para preparar un partido el fin de semana, pero que lo intentaron y lo consiguieron. Con la situación que se vivía, continúa, acabar cuartos por la cola fue un gran logro. Ha asegurado que el equipo estaba descompensado, por lo que considera que los técnicos hicieron más aún de lo que era posible. David asegura que personas que han luchado por el equipo, sin cobrar, algunos de miles de kilómetros, no merecen ver manchado su nombre por declaraciones sin sentido.
