La secretaria de Organización del PSOE en la provincia de Ciudad Real, Blanca Fernández, ha anunciado que los tres alcaldes socialistas afectados por el cierre del servicio de urgencias nocturnas en sus municipios interpondrán en los próximos días un recurso contencioso-administrativo ante el Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha.
Fernández ha dicho que este asunto “es una lucha que no vamos a dejar tan fácilmente porque creemos que hay visos de poder torcerle el brazo al Gobierno regional de Dolores de Cospedal”, algo que hasta ahora no ha podido ser pese a la gran presión de la calle, de los médicos, de los sindicatos y de los ayuntamientos contra una de las decisiones “más graves, más injustas y antisociales” llevadas a cabo por el Ejecutivo castellano-manchego.
Además, y antes de que haya un pronunciamiento judicial sobre la decisión del Gobierno regional del Partido Popular de dejar sin urgencias médicas nocturnas a 21 municipios de Castilla-La Mancha, cinco en la provincia ciudadrealeña, Fernández ha valorado la posibilidad de solicitar la suspensión cautelar de dicha medida.
Fernández ha aprovechado también su comparecencia para acusar a la presidenta Cospedal de “faltar a la verdad” y de actuar con “frivolidad” al manifestar ayer que solo se cierran 20 urgencias de pequeños municipios donde vive poca gente y a menos de 15 minutos de otras urgencias. Ante estas palabras, la dirigente socialista ha dicho que “o la presidenta de Castilla-La Mancha no conoce Castilla-La Mancha o lo que hace es mentir descaradamente y con una caradura que es difícil de consentir cuando se ve a la gente de los municipios afectados llorando porque saben que los servicios de urgencias han salvado vidas”.
Fernández ha insistido en reprochar al Gobierno de Castilla-La Mancha el comportamiento “irresponsable” con el que está actuando y que hasta los propios alcaldes y concejales del PP están escenificando con dimisiones y con recursos judiciales ante la decisión de Cospedal de cerrar las urgencias.
Por último, y preguntada por las falsas acusaciones que están lanzando desde el PP sobre existencia de una agenda oculta del anterior Gobierno para cerrar hospitales y centros de salud, Fernández ha dicho que “me reiría si no fuera algo tan grave”, para añadir a continuación que “es tal barbaridad que cuando se retuerce tanto la mentira no hay nadie que se la pueda creer”, al detallar que hasta el 22 de mayo de 2011 los socialistas habían gestionado la Sanidad desde su transferencia de una manera ejemplar, “pero qué casualidad, desde esa fecha, y si siguiéramos gobernando los socialistas hubieran venido todos los males del mundo”.
