El reconocido pintor y poeta Pepe Carretero (Tomelloso, Ciudad Real, 1962) presenta desde el 7 de noviembre hasta el 6 de enero de 2026 su nueva exposición individual en un entorno privilegiado: la Sala Cátedra de Cavanilles del Pabellón Villanueva, dentro del Real Jardín Botánico de Madrid. La muestra, bajo el título “Alrededor de un jardín. Bodegones y flores”, recoge sus trabajos más recientes, centrados en la representación de elementos naturales y escenas íntimas cargadas de simbolismo.
Las obras expuestas revelan un universo personal que fusiona el realismo tradicional con una figuración europea contemporánea, caracterizada por su peculiaridad, lirismo e introspección. Carretero parte de lo cotidiano para construir imágenes que, como él mismo ha explicado en otras ocasiones, “rescatan de la memoria momentos mágicos, telúricos y conmovedores”, entremezclando lo autobiográfico con lo onírico.
En esta nueva etapa creativa, el artista ha centrado su atención en los jardines y flores cercanos a su vida, elementos que sirven de hilo conductor para una reflexión estética sobre el paso del tiempo, la fragilidad de la belleza y la intimidad del recuerdo. Sus bodegones, óleos y acuarelas están impregnados de una atmósfera que la crítica Pilar Bayona ha definido como “un jeroglífico irresoluto”, en alusión al carácter enigmático y simbólico de su obra.
Guillermo Espinosa, crítico de arte, ha destacado sobre Carretero que es “un pintor manchego pero universal, maestro de la figuración reciente española, que ha logrado convertir la pintura de viajes, paisajes, retratos y naturalezas muertas en algo mágico”. Esta magia es visible en la nueva exposición, donde los elementos vegetales y los objetos del entorno doméstico se transforman en metáforas visuales cargadas de emociones y ambigüedades.
La exposición también refleja la coherencia de un artista que ha desarrollado una trayectoria sólida, alejada de modas y tendencias pasajeras. Su obra, tanto pictórica como poética —con cuatro libros publicados—, gira en torno a la autobiografía, explorando temas como el amor, el deseo, la muerte y la identidad, siempre con una sensibilidad que bordea lo irreal y lo fantasmagórico.
Carretero ha expuesto a lo largo de su carrera en museos y centros culturales de todo el país y su obra forma parte de importantes colecciones públicas y privadas como el Museo Reina Sofía, el Banco de España o el Ministerio de Cultura. También ha disfrutado de becas de creación en Roma, India, México o Filipinas, lo que ha contribuido a enriquecer su mirada cosmopolita sin perder su raíz manchega.
