Una intensa tormenta de granizo afectó en la tarde del martes 3 de junio a diversas zonas de Castilla-La Mancha, dejando importantes daños en explotaciones agrícolas del noreste de Tomelloso. Según testimonios recogidos por entomelloso.com entre agricultores de la zona, la granizada cubrió de blanco los viñedos situados entre la autovía A-43 y la carretera de Pedro Muñoz, en un momento crítico para el desarrollo de la campaña vitícola.
“Fue muy rápido, no duró más de cinco minutos, pero fue suficiente para arrasar. La piedra cayó seca, con mucha fuerza, y ha hecho daño serio en algunas fincas”, relató uno de los viticultores consultados. Los efectos más visibles incluyen rotura de brotes, hojas dañadas y racimos afectados, lo que podría comprometer la producción en parcelas concretas.
A falta de peritaciones oficiales, desde el sector agrario local ya se advierte que en algunas explotaciones los daños podrían ser cuantiosos. “Lo peor es que estaba todo muy avanzado por el calor de mayo, y esto ha echado por tierra parte del trabajo”, añadía otro agricultor que recorría su finca para valorar las pérdidas.
El fenómeno meteorológico se produjo después de que la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) emitiera avisos por tormentas en toda la comunidad autónoma, con previsiones de lluvia intensa, rachas de viento y posibilidad de granizo. Como medida preventiva, el Gobierno de Castilla-La Mancha activó el METEOCAM en fase de alerta a las 14:00 horas, aunque la intensidad del granizo que afectó a Tomelloso superó las expectativas iniciales.
En otras zonas de la región también se registraron incidencias destacadas. En San Clemente (Cuenca), los viñedos sufrieron daños de hasta el 80%, según informó ASAJA Cuenca. También hubo afecciones importantes en Villarrobledo (Albacete) y en varias vías de comunicación, como la AP-36 y la A-43, donde la calzada llegó a quedar cubierta por completo.
En la localidad guadalajareña de Azuqueca de Henares, una intensa tromba de agua provocó 21 de las 30 incidencias que se contabilizaron en toda Castilla-La Mancha durante la jornada, principalmente por acumulaciones de agua en calles, garajes y locales.
El METEOCAM fue desactivado a las 23:00 horas tras remitir el temporal, pero los efectos siguen siendo motivo de preocupación, especialmente en el sector vitivinícola. En Tomelloso, los agricultores esperan ahora la visita de los peritos para determinar con exactitud el alcance económico de los daños, que podrían condicionar seriamente la próxima vendimia.
